No habrá indulto... ni cierre del Camp Nou

La Federación recula y anuncia que no habrá medidas de gracia esta vez. Villar las había anunciado y con una peculiar mezcla de descaro y cobardía las pensaba comunicar en verano, cuando todo se diluye entre la brisa del mar y la paz de espíritu del ciudadano relajado. Pero Lissavetzky le había advertido que la Federación, al ser un organismo privado, carece de competencias para este tipo de medidas, dado que en realidad la facultad sancionadora le viene delegada de la Administración. Y, tal y como está Villar de débil, ha preferido no arriesgarse a un expediente por parte del CSD que sin duda le caería si persistiera en su intención.

Así que no habrá indulto al Camp Nou, pero tengan por seguro que no se cerrará. La voluntad ahora es decir que como se cambió la norma (después de los hechos y con el cierre recurrido ante la justicia ordinaria) y se han incrementado los requisitos para cerrar un estadio, al Barça se le debe aplicar el nuevo criterio. Es decir, que aquello que se produjo antes, se trata con las normas modificadas (ad hoc) después. Así que tararí que te vi. Nada importa que, ya después de modificada la norma, se cerrara, manu militari y en un par de días, el campo del Castellón por aquel incidente con Téllez Sánchez en la Copa. El Castellón no es el Barça.

Para ser claros, nadie es como el Barça para esta Federación, que ya le perdonó aquella retirada de la Copa (¿se acuerdan, cuando Van Gaal dijo que no tenía jugadores para remontar el 3-0 que le endosó el Atlético?). Aquella medida de gracia no era legal, pero el CSD estaba entonces en manos de Gómez Angulo, un bon vivant menos escrupuloso que el actual titular. Así que al Barça se le perdonó aquel espanto de la retirada de la Copa y ahora, con o sin indulto, por el código civil, el de tráfico, o apelando a los estatutos de la Sociedad de Amigos de la Capa, tampoco se le cerrará el campo. Porque no sabe usted con quién está hablando.