Laporte contra el mundo

Los franceses se han plantado en la tercera jornada de este Seis Naciones con dos victorias, pero ni ellos mismos se explican cómo. Ante Escocia ganaron en los últimos minutos gracias a un error garrafal de los escoceses: patada interceptada por Traille y ensayo. Una casualidad. En Twickenham se marcharon con 17-6 abajo en el marcador al descanso, pero Dimitri Yachvili anotó cuatro golpes de castigo y sin pisar la 22 inglesa, vuelven a ganar ante Inglaterra. Increíble pero cierto. Dos de dos. El juego de Francia en estos dos partidos no ha gustado a nadie. Su rugby ha perdido sus señas de identidad (un mísero ensayo en dos partidos).

Francia ya no juega el rugby champagne que le hizo grande y esto ha indignado a gente como el antiguo seleccionador Villepreaux, que se pregunta por qué no juega Frederic Michalak. Pero Laporte no quiere escuchar y sigue a lo suyo. La presión sobre él es cada vez mayor. Los franceses sienten que su rugby no está representado por este equipo. Hoy Laporte vuelve a hacer cambios, recupera a Yannick Jauzion, debuta un zaguero, Laharrague, entra el joven Nyanga en la tercera y quizás le de resultado, pero sigue dejando fuera al favorito de los franceses, Michalak. Además tiene a otro grandísimo jugador en el banquillo, Imanol Harinordoquy. La lista de defenestrados por Laporte es larga: Lamaison, Ibañez, Castaignede, Lievremont, Elissalde, Michalak... y el público ya se ha cansado de estos desplantes. Laporte no cede ante la opinión de los franceses y esta tarde llega a París un Gales temible (7 ensayos en dos partidos). Quizá estos galeses le ayuden a reflexionar después del partido. Pero puede que ya sea tarde.

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