Exhibición de principio a final

El año pasado la Selección Española logró el oro y la plata en Hamilton, pero a mí me ha sabido aún mejor este oro de Verona, porque si en Canadá el equipo llevó más o menos controlada la carrera, ayer la dominó desde el primer hasta el último kilómetro. Ha sido un trabajo bestial el que ha realizado el equipo español. Todos han estado notables, pero me gustaría dar un sobresaliente a Isidro Nozal, Luis Pérez y Tino Zaballa, que han realizado el trabajo más duro de gregarios. A Alejandro Valverde hay que darle un 9,5 por su generosidad. No hay muchos ciclistas que teniendo posibilidades reales para ganar el título del mundo, sacrifiquen sus opciones para que gane un compatriota. Eso ha hecho Valverde con Óscar Freire.

La matrícula de honor hay que dársela a Freire. Otra vez estuvo inmenso y atento a los momentos claves de la carrera. Óscar respondió personalmente a los ataques finales de Basso, Rasmussen y Boogerd en la última ascensión. En ese momento no le podía ayudar el equipo, pero si les dejaba coger veinte segundos, adiós. Y a Freire se le vio sobrado de fuerzas en su respuesta. También hay que darle otro sobresaliente a Paco Antequera, que ha sabido transformar a la Selección Española en un grupo unido, el equipo más potente de los Mundiales.