Una actitud bochornosa de Lance

Cayó el segundo triunfo de etapa español y nos sabe a poco. Veníamos con tantas ilusiones al Tour que no nos consuelan ni estos pequeños éxitos. Pero mirándolo un poco detenidamente la verdad es que los personajes secundarios del pelotón español han funcionado perfectamente en este Tour. Mercado ha ganado una etapa, Aitor González, otra, y gente como Chente García, Flecha, Landaluze o Egoi Martínez estuvieron cerca de conseguirla. Mancebo, Sastre y Pereiro han estado en su sitio en la general. Los que nos han fallado han sido los primeros espadas: Mayo, Zubeldia, Heras, Sevilla... Ayer lo hicieron tan bien nuestros segundos actores que se metieron tres de seis en la escapada buena y al final el triunfo se jugó entre dos españoles. Chente García es no más rápido, pero sí más potente para los últimos metros y también tiene más experiencia que Mercado. Pero curiosamente el granadino fue más listo, le dejó al navarro que llevara el peso de la fuga, racaneó en los relevos y le sorprendió atacándole en el momento oportuno.

Respecto a la actitud de Armstrong en la etapa de ayer debo decir que me ha parecido bochornosa y que no hace ningún bien al ciclismo. Saliendo en busca de Simeoni e imponiendo que no pueda escaparse se ha puesto en evidencia él mismo y ha conseguido que hablemos de su médico, Michele Ferrari y de todo lo que precisamente le ha molestado que de lo que dijo Simeoni. El campeón debe serlo dentro y fuera de la bicicleta y las venganzas personales hay que dejarlas fuera del pelotón. También me ha parecido fatal la actitud pelota de los Nardello, Guerini, Peron y compañía, que han abucheado a Simeoni.