El fracaso de dos campeones que compromete su futuro
Los franceses unen la crisis institucional a sus malos resultados en 2019 y los británicos subsisten cerrando todas las parrillas de esta temporada.
Por el camino se habrán quedado Nico, Magnussen, Palmer o Sainz y ahora regresará Ocon junto a Ricciardo, que está cada vez menos convencido. Y a la crisis deportiva, se une la institucional: su expresidente, el brasileño Carlos Ghosn, ha sido detenido bajo acusaciones de malversación de fondos e irregularidades fiscales y la nueva presidenta, Clotilde Delbos, admite que se revisarán las inversiones en competición.
En cuanto a Williams, su situación es aún más delicada. Su subsistencia pasa por los patrocinios que aportan sus pilotos: de Lawrence Stroll y el capital ruso de Sirotkin se pasó a los anunciantes polacos de Kubica, más el alivio económico que haya permitido Mercedes por alinear a Russell. En 2020 sus dos pilotos serán el británico y Latifi, que tiene muchas novias y soporte financiero. Su padre es uno de los accionistas importantes de McLaren. En la casa de Grove, que ahora dirige Claire Williams, hay mucho que solucionar. Y da la impresión de que las de Williams no se solucionan ni siquiera con una buena pretemporada.