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Donkey Kong Country

Donkey Kong Country - Vine Valley

No solo las aventuras requieren guías donde se te informe de los personajes con que hablar, mercadear o las secciones de lucha más peliagudas. La última incursión de Rare en las plataformas remasterizando uno de los grandes del género está infestada de zonas de acceso imposible, trampas y enemigos la mar de socarrones.

VINE VALLEY

Cultura Buitre:

El primero de los pasos en este frondoso mundo supone la superación de una retante fase donde deberás calcular todos los movimientos que efectuarán las aves carroñeras. Lo primero es encontrar la letra K, que está escondida debajo de un buitre que lanza cocos desde un neumático, desde esa zona, deberás machacar el suelo para hacerla aparecer. Coge la rueda y llevala al borde del precipicio para que haciéndote votar te eleve a una área de bonificación.

A partir de aquí tan solo debes limitarte a prácticar y saltar con el barril en el momento idóneo para rebotar en la espalda de un pájaro y salir indemne de la operación. Después del barril de salvación, y pasados más trángulos de buitres, verás en una plataforma la vocal deseada. otro aspecto que puede reportarte problemas es cuando se combinan abejas con aves. Lo mejor es esperar a que se sitúen delante de ellas y soltarte (siempre teniendo en cuenta el retraso que supone estar lejos del objetivo). Después del barril del personaje, y pasado uno de esos engendros que suelta nueces, podrás coger un trozo de madera prismático y soltarlo en un muro para reabrir más zonas de puntuación. Las dos letras restantes se sitúan casi al final, una de ellas dentro de la recién estrenada salita, estando la última justo al lado del buitre que casi gobierna la salida.

Pueblo árbol:

Aunque no lo aparenten sus intrincadas secciones de puntería, es un nivel de lo más sencillo. Habiendo pasado unos cuantos castores y proyecciones a barriles, verás en lo alto de una plataforma circular la primera de las letras, muy sencilla de capturar.

La vocal se halla después de haber salvado la partida, cuando una de esas cajas colocadas entre casetas te dispara arriba donde otro montón de madera recojerá al simio. Vigila lo que viene ahora, ya que es clave para no exasperarte y hastíar esta pantalla.

La mayor parte de lo que resta te lo pasarás tumbando casi automáticamente, así que calcula con suma presición y manteniendo el margen de error para que el barril no te expulse antes de hora. Siempre recuerda que debes saltar antes de que el objeto pase por delante de tu meta, para ello, debes tener en cuenta la velocidad con que va. Por ejemplo, el primero de estos puzzles es bastante lento, por lo que deberás soltarte justo en el momento en que esté el objetivo en la parte más baja del monitor. Con algo de práctica seguro que lo cumplís con creces.
Al llegar a la zona donde ya has dejado atrás el barril con la señal de DK, verás proyectores automáticos, y inmediatamente después un plátano solitario en el barranco. Si saltas, te harás con la N y te sumirás en una fase de bonus. Al salir te espera el área más peliaguda...
Por último, la letra G está cerca de un neumático incrustado en el suelo, y habiendo pasado por encima de unos cuantos buitres. Desde aquí, hasta el final, apenas hay dificultades.

Bosque frenético:

Del barril pasamos a las lianas móviles. Hasta llegar al punto de partida no hay secciones complicadas, excepto cuando debas coger las letras, una de ellas, situada tan solo empezar en la primera cuerda custodiada por una abeja. La otra, también detrás de este insecto, solo que será mejor hacerte con ella cuando estés de vuelta, y arriesgándote a sucumbir ante los pinchos del animal volador.

Una vez tengas el territorio marcado, si usas a Diddy te irá mejor por sus reducidas dimensiones y la versatilidad ante tanto subir y bajar.

Como consejo, que quede claro que descender hacía la dirección donde lo hacen las avíspas es sustancialmente más afortunado, especialmente porque no todas llegan al final de su recorrido, y casi nunca llegarán a darte en una situación tan decantada hacia una dirección. La incial N está casi palpando la precipitación en el suelo en una de estas áreas, la cual se caracteriza por tener una hilera de plátanos en forma de curvatura. Tras ello, te esperan bucles circulares de los enemigos, cuya única forma de salir vivo es quedarte en la posición dentral, e ir decantandóte a medida que se acerca un oponente. No dudes, hazlo, porque estas situaciones de incógnita terminan muy mal.

La G está después de volar un rato entre tanto mareo de engendros con rayas en su piel. Lo que queda es sólo tierra maciza, y allí, podrás entrar en dos pantallas de bonificación; una de ellas está habiendo dejado atrás los precipicios y saltando sobre las espaldas de un buitre, el cuál te conduce a un barril explosivo. El otro, cogiendo un barril cerca de un Kritter (Kremling terrestre), y soltándolo en el muro que viene posteriormente. Cuando salgas de ahí, una liana más con cuatro plátanos y estarás en la salida.

Templo Tempestad:

De nuevo inmerso en una arquitectura Maya. En esta ocasión no dejes que te atemorize los tintes oscuros ni los castores montados en ruedas del tamaño de una locomotora. Por suerte la cosa no se pone a la carrera hasta habiendo pasado el punto de salvación, lo que enternece un poco la dificultad.

La primera letra está justo en la liana que encuentras antes, mientras que la O, ha sido colocada en la parte superior del único momento de toda la fase en la que debes intercambiar columpio en el aire.

Cuando ya tienes la situación controlada, es el momento en que se enturbian las cosas. Primero por culpa de la precipitación que puede suponer escaquearse de una comadreja sin ser engullido por dos abejas situadas bajo un foso. Lo mejor en este caso es apurar al máximo el salto y no precipitarse. Como de costumbre, en momentos como este recomendamos fervienteme a Diddy. La N está inmediatamente después de haber dado esquinazo al primer roedor, y bajo el montículo únicamente perturbable con un bote fuerte en la superfície. Luego se te propondrá una maratón más larga e intensa si cabe, cuyas únicas trabas son tus propios nervios, y un par de Kremlings saltadores.

Estando ya ante el último de los dentados enemigos que círcula detrás tuyo, al satar a la liana que te lleva al final, desciende hasta la parte del final sin temor a caer, y lograrás alcanzar la útlima de las letras.

Banda Orangután:

Volvamos a la normalidad del trópico, aunque esta vez, los monos parecen haberse vuelto locos y no paran de lanzar barriles rodando de árbol a árbol... incomprensible. En fin, que lo primero que debes hacer es avanzar evitando a todos los Kremlings saltarines y coger la K que piende del viento. Posteriormente llegarás a una zona donde hay 3 hileras de plataformas adueñada por 3 Klap Traps.

En la parte baja podrás acceder a la vocal si haces rodar a alguno de tus simios. Por contra, en el pináculo está Expresso para hacerte llegar al punto de salvar la partida. Si vuelves atrás donde estaba el barril para hacerte con los servicios de alguno de los componentes de la família Kong, podrás entrar en una habitación secreta si saltas y planeas con el avestruz.

Como ya habrás comprobado, los brincos de multitud de cocodrilos han dejado paso a monos enfurismados soltando barril a tutiplén, en este caso, es mejor subir las pendientes despacios para no terminar siendo víctima de tu propia impaciencia. Si buscas las dos siglas restantes, están bajo un cúmulo de rocas y pasarelas, y en una fase de bonus situada después de la montña rusa de lianas y barriles, habiendo pasado el único neumático de toda la fase.

Ciudad Almeja:

Otra fase acuática, sin embargo, el protagonismo de los calamares rodantes pasa a las almejas a las que les sobran las perlas. Cuando hayas pasado el primero de estos moluscos, y una vez arriba, introducete por la pared de la izquierda cogiendo a Enguarde y la letra K. Después de esto, la zona plagada de besugos será pan comido, al igual que hacerte con la vocal sobre esa misma área.

Evita todos los proyectiles que lanzan los caparazones y esquiva el movimiento pausado de los tiburones más pequeños hasta llegar al punto de salvar la partida. No verás la N hasta que dejes atrás el sector empinado infestado otra vez de tiburones, aunque de un tamaño algo más acentuado. Avanzando por el mar calmado llegarás casi al final, donde hay un par de pulpos y en la parte inferior de un pequeño muro la letra restante protegida por una almeja que lanza 5 perlas de un escupitazo.

No tendrás mayores problemas para salir vivito y coleando...

Final Boss 3:

Diddy vuelve a ser esencial para derrotar a la abeja gigante. Debido en mayor grado por su diminuta estatura, y porque con solo aguantar el barril en su pectoral tienes de sobras como para causar daño al insecto. Espera a que el mismo venga hacía ti y muestrále el objeto de madera para quitarle energía, luego, evita sus zigzagueos que irán incrementando de velocidad y cantidad a la vez que recibe más golpes. Repitiendo tan fútil operación 5 veces la enviarás con el resto de final bosses, al infierno.