E. LEAGUE (1/16, IDA) | LEIPZIG - R. SOCIEDAD
Leipzig, inicio de la revancha de la Real contra sí misma
Con el recuerdo de la dura eliminación ante el United hace un año, el equipo de Imanol busca salir vivo del Red Bull Arena para soñar con los octavos. Januzaj, baja de última hora.
La Real Sociedad vuelve a estar en el mismo punto de partida que hace un año. Y que en 2018. Superada la fase de grupos de la Europa League, el reto es ser igual de competitivos en la fase de eliminatorias, su gran caballo de batalla en sus últimas participaciones continentales. Nunca ha pasado de esta ronda de dieciseisavos en esta competición europea, así que ese es su gran reto contra el Leipzig (sigue el partido en directo en AS.com).
Antes fueron Salzburgo y Manchester United, desde que a la Copa de la UEFA se le llama Europa League. Los dos dejaron a los donostiarras en el camino con una sensación de que no estaban cerca de competir la clasificación. Especialmente dolorosa fue la eliminación del año pasado, con un 0-4 en la ida que les dejó sin opciones para la vuelta en Old Trafford. Dicen que a la tercera va la vencida. Y eso es que lo que pretenden los de Imanol Alguacil, que inician en Alemania lo que podemos considerar como una revancha contra sí mismos.
Sigue escociendo en el vestuario txuri-urdin la manera de quedar eliminado el año pasado, con esa frustrante sensación de sentirte inferior a tu rival. Evitan decirlo abiertamente, pero reconocen que tienen una espina clavada. Y al principio de esta temporada, el director de fútbol, Roberto Olabe llegó a hablar de buscar la revancha contra ellos mismos en Europa.
El momento de empezar cobrarse esa deuda parece que ha llegado. Se llama RB Leipzig, un buen rival para demostrar que han aprendido la lección de hace un año: equipo potente que cae de la Champions League, subcampeón en la última Bundesliga, con un presupuesto muy superior al realista, y una plantilla potente y de gran calidad. Es verdad que tiene todos los ingredientes para convertir la eliminatoria en una misión casi imposible, pero no es menos cierto que al mismo tiempo cuenta con todos los argumentos para poder quitarse por fin de encima las malas sensaciones del año pasado. Y de paso acceder por fin a los octavos de final, esa ronda que se le resiste en este torneo.
De momento, el primer paso es salir vivo del Red Bull Arena. Porque viendo el nivel que está exhibiendo en la Bundesliga el RB Leipzig, no parece sencillo. Y luego ya tratar de rematar la faena en casa, en el Reale Arena, delante de su afición. Ese es el objetivo. Volver vivos a San Sebastián. Porque la racha de resultados del equipo alemán en este 2022 da miedo, mostrando un nivel y un poderío físico realmente abrumadores.
Con jugadores como Nkunku, Haidara, Forsberg, André Silva, o los españoles Angeliño y sobre todo, Dani Olmo en un gran estado de forma. La faena es de categoría. Pero la Real viaja convencida de sus posibilidades, segura de que le puede competir cara a cara a este nuevo rico europeo. Viene de recuperar autoestima con su triunfo contra el Granada, y no se siente inferior a nadie. No hay razón para ello. De momento, en sus viajes anteriores a Alemania no le fue mal del todo. Empató en Hamburgo, Colonia y Stuttgart, y perdió en el descuento en Leverkusen. Cualquier de los resultados que logró en esas ocasiones le vale para dejar la eliminatoria abierta. Pero quizá toque ya ganar, por muy difícil que parezca. Eso sí que sería una redención en toda regla.
Visita Leipzig el equipo txuri-urdin con la baja sensible de última hora de Januzaj, así que será el turno de Portu en la parte derecha del ataque de la Real. El de Beniel no atraviesa por su mejor momento, pero merece mejor suerte de cara a la portería rival de la que está teniendo. Ha llegado el momento de que se levante y se rebele. Tampoco estará en la sala de máquinas Zubimendi, sancionado.
Y ahí Imanol tiene tres opciones de las que tirar: Zubeldia, Illarramendi y Guevara. O cambiar de sistema para jugar más replegado, dejando la iniciativa al Leipzig, teniendo en cuenta su tremendo peligro en los contragolpes, algo que ya ha hecho esta temporada en otros partidos grandes como el del Metropolitano. Y luego fiar toda su suerte a la calidad de Merino, Silva, Oyarzabal e Isak, que parece que tienen el sitio asegurado. Sorloth regresa a su casa, está cedido por parte del Leipzig, pero salvo sorpresa, volverá para empezar el partido en el banquillo. La Real tiene ante sí una gran oportunidad para demostrar que sí puede pelear con los grandes clubes de Europa, que lo de hace un año fue un accidente ya superado, y que puede instalarse entre los mejores del continente. Leipzig, ¡allá vamos!