Por vez primera, la organización de una fase final corría a cargo de dos países: Bélgica y Holanda, con cuatro sedes cada uno. Esta organización conjunta suponía todo un reto no sólo para ellos, sino también para la UEFA, que veía con recelo esta arriesgada iniciativa. La seguridad de los aficionados y los movimientos de los miles de periodistas desplazados fueron los grandes problemas que se encontraron. En cuanto al fútbol, apenas hubo sorpresas. Decepcionaron Inglaterra y Alemania, dos selecciones en horas bajas, y otras dos históricas, Francia e Italia, disputaron una de las finales más emocionantes que se recuerdan (Foto de apertura: demasiados globos en la inauguración).
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La única candidatura
A pesar de las dudas de la UEFA hacia una candidatura conjunta, Holanda y Bélgica se encargarían de organizar la Eurocopa de 2000. El organismo europeo, que en el pasado se había opuesto a propuestas similares de Escandinavia, no tuvo más remedio que aceptar ya que ésta fue la única candidatura cuando se cerró el plazo en septiembre de 1994. Además de la organización, también preocupaba la falta de grandes escenarios.
La mascota y el balón
Benelucky, una mezcla de león y pequeño demonio, fue la mascota de esta Eurocopa. Los colores de su pelo reflejaban la unidad de los anfitriones. El balón oficial fue el Adidas Terrestra Silverstream. Rodeado de una capa de microesferas de gas, sorprendió la velocidad que llegaba a alcanzar.
Inauguración sosa y sin sentido
De una mala organización no cabía más que esperar una ceremonia inaugural tediosa y carente de imaginación. Lo que vieron los asistentes en el Rey Balduino de Bruselas no fue más que una mala copia de la apertura de los Juegos Olímpicos de Barcelona: mucho globo, mucho zanco y mucho gigante. Eso sí, el acto fue breve: trece minutos de ceremonia.
Globos y más globos en un acto de ceremonia inaugural que no será recordado por su frescura.
1 DE KUIP (Rotterdam) El Stadion Feyenoord toma este sobrenombre por su vanguardista forma de ‘bañera’, que es lo que significa en castellano De Kuip. El estadio se construyó en los años 30, impulsado por el gran entusiasmo popular, con materiales propios de la arquitectura moderna como el acero o el vidrio. De Kuip, con capacidad para más de 50.000 personas, acogió tres encuentros de la primera fase, uno de cuartos y la gran final.
2 REY BALDUINO (Bruselas) El sustituto del estadio Heysel fue inaugurado en 1995 y toma el nuevo nombre como homenaje al rey belga, fallecido dos años antes.
3 GELREDOME (Arnhem) Inaugurado en 1998, en él se celebran además diversos eventos y actividades comerciales. Tiene techo retráctil y el césped es extraíble.
4 JAN BREYDEL (Brujas) El estadio del Brujas toma su nombre del héroe local del siglo XIV Jan Breydel. Cuenta con 30.000 asientos, y acogió cuatro partidos.
5 AMSTERDAM ARENA (Amsterdam) Inaugurado en 1996, el Arena fue el primer estadio de Europa con techo retráctil. En él se jugaron cinco partidos.
6 SCLESSIN (Lieja) Este estadio, también conocido como Maurice Dufrasne, fue inaugurado en 1984 y está en el barrio de Sclessin. Con capacidad para 30.000 espectadores.
7 PHILIPS STADION (Eindhoven) El estadio del PSV fue inaugurado en 1913, aunque ha sufrido muchas reformas hasta alcanzar un aforo máximo de 35.000 personas.
8 STADE COMMUNAL (Charleroi) El estadio del Sp. Charleroi fue totalmente remodelado de cara a esta Eurocopa para poder albergar a 30.000 espectadores.
REUTERS
Violencia por doquier
Lamentablemente, el fútbol no fue el único protagonista de esta Eurocopa. Los altercados violentos se repetían con tanta frecuencia por Bélgica y Holanda que las cárceles no daban cabida para las miles de detenciones que se produjeron durante este mes.
La organización no lució
La experiencia de que dos países organizasen un evento de este calibre no fue todo lo exitosa que se esperaba. Las ingentes cantidades de periodistas y aficionados que se movían por los dos países superaron las previsiones de la organización.