Corea del Sur vuelve a ser la selección vencedora en la segunda edición de la Overwatch World Cup tras derrotar a Canadá en la final por un contundente 4-1, no sin tener que esforzarse a través de los cinco mapas que duró el encuentro.
La gran fuerza con la que ha destacado la división coreana durante la competición ha sido digna de elogio, llegando a derrotar a numerosos equipos de la fase de grupos con un resultado perfecto. Una vez en playoffs, consiguieron sobrepasar a Estados Unidos por 3-1 y posteriormente a Francia con la misma eficacia.
Canadá lo tuvo más complciado para vencer a los rivales de su lado del bracket, sufriendo más frente a Australia y Suecia. Pero aún así se impusieron y llegaron a la gran final, lugar en el que se encontrarían con su peor pesadilla.
La excelencia surcoreana domina Overwatch
En 2016, la primera edición de la copa mundial se saldó con una clara victoria de Corea del Sur. Este año el nivel de las escuadras era mucho mayor, incluyendo el de la propia plantilla coreana, cuyos jugadores se encuentran repartidos entre las divisiones de New York Excelsior y Seoul Dinasty para la futura Overwatch League.
Su gran capacidad para trabajar juntos, unida a la posibilidad de hacerlo mediante picks poco convencionales en momentos concretos les ha permitido llegar hasta la final y coronarse como campeones de una edición mucho más exigente y espectacular que la del año pasado.
La formación canadiense, que hizo lo que pudo rascando algunas victorias, no consiguió impresionar a sus rivales a nivel general, llegando a ser masacrados continuamente por la fuerza combinada de los jugadores coreanos. Como mucho lograron destacar en la cuarta partida en Junkertown, su única victoria plena frente a profesionales que están destinados a poner en aprietos a sus oponentes en la gran liga que se avecina.