VI NacionesTEMPORADA 2016

Argumenta Vern Cotter, el ambicioso seleccionador neozelandés con el que Escocia firmó un esperanzador Mundial, que el Cardo está listo para ganar este 6 Naciones. Viniendo de un equipo que el pasado año recibió la Cuchara de Madera, es mucho. Si se enfoca desde el punto en el que tuteó y perdió los cuartos de final del Mundial ante Australia en el último instante, quizá no sea tan disparatado. Y es que Escocia ha sabido ganarse el cariño gracias a un rugby decidido y que recuerda a las décadas gloriosas de los 80 y los 90. Y es que desde que arrancó el formato del 6 Naciones es el único país (con Italia) que no ha logrado vencer el Torneo. Sus generaciones predecesoras no alcanzaban el nivel de sus rivales y los entrenadores tampoco encontraban la vía para equipararles a Inglaterra, Francia, Irlanda o Gales.

Todo cambió desde la marcha de Andy Robinson. El interino Scott Johnson sacó de la UCI a un equipo moribundo, se apoyó en el trabajo de Townsend con la franquicia de Glasgow y arrancó un nuevo camino. Sin complejos, Escocia (pese a perder partidos) comenzó a creer y a plantar cara. Eso fue el preludio, un testigo digno para que Cotter (que hizo subcampeón de Europa a Clermont) lanzara a sus jugadores a la elite. En el último 6 Naciones se llevó la Cuchara de Madera (Italia le ganó en Edimburgo), pero el Mundial fue grandioso. Y es que Escocia es el equipo que más ha crecido, y eso da esperanzas. El nuevo seleccionador tiene, además, el crecimiento del equipo de Edimburgo, y eso le da solidez. En la convocatoria apenas hay dos debutantes (Fagerson y Sutherland), ambos en primera línea. Aprenderán de Dickinson y Nel. En la segunda lucen los hermanos Gray y las dudas aparecen en la tercera. Laidlaw capitanea en el 9 y a su lado, el solvente Russell. Al fondo, alegres centros y alas que mejoraron conforme adquirían internacionalidades. Y luce el zaguero Hogg, joven pero ya experto.

Escocia tiene un proyecto a medio plazo, pero sólo con buenos resultados se aumentará la confianza sobre la que edificar el bloque que se eleve al grado de potencia continental. Tendrá un torneo duro de primeras, recibiendo a Inglaterra, rival histórico. Si gana en Murrayfield y levanta la Calcutta Cup, se creerá capaz de todo y Cotter estará en lo cierto al decir que el Cardo puede ganar el 6 Naciones. De ahí irá a Cardiff (su moral dependerá del resultado ante el XV de la Rosa) y después a Roma, donde Italia debe dejar de ser un rival directo (pese a que los Azzurri se le atragantan). El broche dejará la llegada de Francia a Edimburgo y una última salida a Dublín. No es favorito a ganar el Torneo, pero sí que puede animarlo dando la campanada esperada ante alguno de los llamados al título. (José A. Vera)

BT Murrayfield - Edimburgo

Aforo:

67.130

Año de construcción:

1925

Web oficial del estadio