CONFLICTO UCRANIA - RUSIA

Muere Olena Kushnir, doctora y símbolo de la resistencia en Ucrania

Se había alistado de forma voluntaria, junto con otras cien mujeres, para defender la ciudad. Rusia ha anunciado este jueves la toma del control de Mariúpol.

A primera hora de la mañana de este jueves, Rusia ha anunciado el control de la ciudad de Mariúpol por parte de sus tropas. "Las Fuerzas Armadas de la Federación Rusa y las milicias de la república popular de Donetsk han liberado Mariúpol, los restos de las formaciones nacionalistas se refugiaron en la zona industrial de la planta Azovstal", afirmaba el ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigu.

Se ponía de esta forma fin a un asedio que ha durado semanas, y que se había intensificado en los últimos días. En uno de ellos, el pasado domingo, el ejército de Vladimir Putin acabó con la vida de Olena Kushnir, sargento mayor y doctora de la Guardia Nacional de Ucrania. Ella fue una de las alrededor de cien mujeres que se alistaron, de forma voluntaria, para defender la ciudad de la ofensiva rusa.

Como Olena, algunas de ellas son médicas. Aprovechan cualquier refugio, por pobres que sean las condiciones, para montar un hospital de forma improvisada y atender a los soldados heridos ucranianos. "No tengáis lástima por mí, soy médica, luchadora y ucraniana, cumplo con mi deber", le dijo Kushnir a una amiga días antes de fallecer en la defensa de Mariúpol.

Duras condiciones en Mariúpol

La ciudad del sureste del país, uno de los grandes objetivos de Rusia, se había defendido en las últimas semanas del asedio enemigo. Hasta que hoy, finalmente, ha caído. Olena quería, según su amiga, "sacudir Occidente", con el fin de que Europa reaccionara. En un vídeo compartido en redes sociales, pedía la evacuación de civiles en Mariúpol, la posibilidad de llevar medicinas y facilitar el entierro de los fallecidos.

"En Mariúpol todavía hay gente, están en los sótanos, están bajo tierra, necesitan de todo", decía Olena, que deja un hijo huérfano, después de perder a su marido, militar, al inicio de la guerra. A principios de marzo pedía ayuda para que los civiles del país pudieran sobrevivir, en lugar de escribir libros o hacer películas sobre su heroica lucha.

La periodista Tetyana Danylenko explica las duras condiciones en las que se encontraban estas mujeres voluntarias. "No tenían agua, comida, ni la garantía de una higiene básica o de supervivencia". Danylenko asegura que Olena dejó claro que no querían ser "ni héroes ni mártires". El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, aseguró que la caída de esta ciudad supondría la ruptura de cualquier negociación de paz. "La ciudad no existe, los rusos han decidido arrasar con ella a cualquier precio", ha señalado el ministro de Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba.