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Los peces que crean olas para espantar al enemigo

Según un estudio, estos peces trabajan juntos en grupos de hasta cientos de miles de ejemplares para originar ondas superficiales y ahuyentar a posibles atacantes.

Según un estudio publicado en la revista 'Current Biology', estos peces trabajan juntos en grupos de hasta cientos de miles de ejemplares para originar ondas superficiales y ahuyentar a posibles atacantes.

Se trata de los mollies del Teapa, un pez de origen mexicano, concretamente de los Baños del Azufre cerca de Teapa, Tabasco. Los Baños del Azufre son ojos de agua sulfídicos que contienen altas concentraciones tóxicas de ácido sulfhídrico, si bien esta especie ha evolucionado para tolerar estas condiciones críticas.

Así se defienden los peces

"Al principio no entendimos muy bien qué estaban haciendo los peces. Una vez que nos dimos cuenta de que se trataba de ondas, nos preguntamos cuál podría ser su función", afirma David Bierbach, coautor junto con Carolina Doran y Juliane Lukas, también en el Instituto Leibniz de Ecología de Agua Dulce y Pesca Continental.

Las olas de peces como comportamiento antidepredador colectivo emergente

Al ser atacados por un ave depredadora, estos bancos de peces responden con ondas conspicuas y repetidas. En una ola, generalmente el pez más cercano al depredador se sumerge primero con su patada de cola perturbando la superficie del agua.

Los peces vecinos cercanos realizan el mismo comportamiento, y la perturbación en la superficie del agua se aleja del depredador en forma de ola. Las aves grandes como las garcetas suelen desencadenar el saludo previo al ataque cuando se acercan a los bancos de peces, mientras que los martines pescadores y los kiskadees suelen ser lo suficientemente pequeños como para escapar de la detección a su llegada.

Esto significa que la primera oportunidad que tienen los peces para detectar la presencia de depredadores más pequeños es cuando el primer ataque tiene lugar en sus proximidades. En cuanto se posan en ramas cercanas a su hábitat, se alertas, pero deben realizar también una 'agresión'. Si están bebiendo en el agua, no pasa nada.