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¿Cómo afecta la subida del salario mínimo a las pensiones?

La subida del salario mímo interprofesional tendrá una consecuencia directa para el sistema de pensiones público y la cuantía de las futuras pensiones.

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El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció el pasado 1 de septiembre de 2021 que la "voluntad" del Ejecutivo es ejecutar una subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) de manera "inmediata". El SMI actual es de 950 euros mensuales dividido en 14 pagas. Sin embargo, esta cuantía lleva congelada desde el último Consejo de Ministros de 2020. La nueva subida será de 15 euros y tendrá validez a finales de este mismo año. Esto tendrá una consecuencia directa para el sistema de pensiones público y la cuantía de las futuras pensiones.

Subida de 15 euros para 2021

El comité de expertos del gobierno estableció que la renta mínima debía subir entre 61 y 99 euros de aquí al año 2023, hasta situarlo al final de ese periodo en entre 1.012 y 1.047 euros por 14 pagas, para poder cumplir el objetivo de llevar el SMI al 60% del salario medio neto en esta legislatura. Esto supone incrementar el SMI entre un 6,4% y un 10,4% respecto a la cantidad actual de 950 euros mensuales.

Consecuencias de la subida del SMI en las pensiones

Según BBVA, la subida del SMI tiene dos consecuencias que afectan de manera directa al sistema de pensiones público. Estas consecuencias son: el incremento en la recaudación por cotizaciones sociales y un aumento de las bases reguladoras de las prestaciones de la seguridad social.

Subida de las Cotizaciones

Como hemos dicho anteriormente, la subida del Salario Mínimo Interprofesional tendrá una consecuencia directa en la subida de las cotizaciones sociales, que afectará a las cuantías de las futuras pensiones.

Esto se debe a que las bases mínimas de cotización, sobre las que posteriormente se aplican los tipos de cotización de los trabajadores, suben en función del SMI y las pagan, en mayor medida, los empresarios.

Subida de las Bases reguladoras

La Base Reguladora es una cifra que se calcula dependiendo el tiempo cotizado por un trabajador. Y entre otras muchas cosas, sirve para calcular una pensión, ya que no todos los pensionistas perciben la misma cantidad. Es decir, la cuantía de la prestación que va a recibir el trabajador será un porcentaje de esa base reguladora.

El informe de BBVA dice que, si se sube el SMI, también se producirá un incremento de las bases reguladoras de las prestaciones de la seguridad social. "Al incrementarse las bases reguladoras de los trabajadores en los próximos años aumentará considerablemente el gasto en pensiones de jubilación, que es el más importante, pero además también el coste del resto de las prestaciones, como el de la incapacidad permanente", explica el informe.

Para calcular la base reguladora de las de jubilación, hay que tener en cuenta las bases de cotización a la Seguridad Social durante los años anteriores a dejar la vida laboral. Se sumarán las bases de cotización y, a partir del curso que viene, se dividirá por 350 (actualmente es de 322) durante los 25 años anteriores.

El informe indica también que: "Para aquellas personas que les sea aplicable la legislación anterior a 1 de enero de 2013, en aplicación de la disposición transitoria cuarta de la LGSS, la base reguladora será el cociente que resulte de dividir por 210 las bases de cotización del interesado durante los 180 meses inmediatamente anteriores al del mes previo al del hecho causante".

Por ello, al incrementar considerablemente la base reguladora debido al incremento del SMI aumentará el coste de las pensiones de jubilación durante los próximos años y el gasto de la Seguridad Social.