"Durante el mes de abril se va a acelerar el ritmo. Vamos a cumplir los objetivos de tener el 70% de la población a finales de verano". Son las palabras y el objetivo de Pedro Sánchez, presidente del Gobierno de España. Desde un primer momento, el 70% de la población inmune para el verano ha sido el gran objetivo para el Ministerio de Sanidad. Una meta que parece estar cada vez más cerca, con la llegada de una mayor cantidad de dosis.

Además, a las vacunas de Pfizer, Moderna y AstraZeneca se le unirá la de Janssen a mediados de este mes. Con ella, gracias a que consta de una sola dosis, se dará el empujón definitivo a una campaña de vacunación que nació con muchas dudas. En España, a día de hoy se han contagiado 3.317.948 personas y han fallecido 75.911 por la COVID.

Sin embargo, a pesar del avance en la vacunación y la llegada de más dosis, todavía es necesario un esfuerzo extra. El total de población con la pauta completa de la vacuna no llega a los tres millones (2.852.806) y, a este ritmo, la plataforma Time To Herd pronostica que la inmunidad de rebaño se alcanzará en febrero de 2022.

La clave para conseguir la inmunidad de rebaño

Rosario Cáceres, vocal de la Asociación Española de Vacunología, celebra en una charla con El Intermedio la llegada de cada vez más vacunas y confirma que, de ser cierto que en el segundo trimestre serán todavía más, el objetivo podría llegar a cumplirse. "Si es verdad que llegan esas vacunas, podríamos alcanzarlo a finales del verano".

Para ello, para poder conseguir la tan ansiada inmunidad de rebaño (una previsión "optimista" según Cáceres) que permitiría regresar poco a poco a una vida prepandémica, asegura que hay se debe ir "todos a una". Un planteamiento que ha observado en otros países pero que apunta que no se da en España. De ahí, la variabilidad en los datos de vacunación entre las comunidades autónomas. "Tendríamos que ir como una unidad".

La vacuna de AstraZeneca, un ejemplo

La experta saca a relucir el caso de la vacuna de AstraZeneca, con la que muchos países, incluido España, paralizaron la vacunación tras la detección de algunos eventos de trombosis de senos venosos. "Esa disparidad en los países de la Unión Europea causa mucho desconcierto y desconfianza en la población". Es con este suero con el que más problemas ha habido desde su aprobación: países que limitaron su inyección a menores de 55, otros a menores de 65 y otros que la paralizaron momentáneamente. Además, los repetidos retrasos en las entregas de dosis a la Unión Europea.