CORONAVIRUS

El ambicioso plan de vacunación del Reino Unido

Más de 17 millones de ciudadanos británicos han recibido ya su primera dosis de la vacuna, lo que supone casi uno de cada tres adultos.

Reino Unido fue de los primeros países en empezar a vacunar, es de los más avanzados en el proceso de vacunación, y también pretende ser de los primeros, o incluso el primero, en finalizarlo. Y para ello Boris Johnson, primer ministro del país, ha comunicado un ambicioso plan que de poder lograrlo será algo histórico. Antes de finales de julio quiere haber vacunado a toda la población adulta del país.

"Nos hemos propuesto ofrecer una vacuna a todos los adultos para finales de julio, lo que nos ayudará a proteger antes a los más vulnerables, y tomaremos más medidas para aliviar algunas de las restricciones vigentes", ha explicado Johnson. De momento ya han recibido la primera dosis 17 millones de personas, es decir, uno de cada tres adultos.

Y para conseguir esa meta, el primer objetivo será vacunar antes del 15 de abril a los adultos mayores de 50 años y a aquellos con problemas de salud.

Apuesta por retrasar la segunda dosis

Una de las decisiones de mayor riesgo tomada por Reino Unido ha sido la de apostarlo todo a la primera dosis, intentar llegar con ella al mayor número posible de personas, y retrasar la inyección de la segunda dosis. Así, en lugar de administrar las vacunas en dos dosis con un plazo fijo de 21 días, algo recomendado con la de Pfizer, ha optado por retrasarla hasta tres meses, o 12 semanas.

El objetivo, conseguir algo de inmunidad en el mayor número de personas, evitando así situaciones de coronavirus de gravedad o dejando la inmunidad completa para más tarde. "Recomendamos que se priorice inicialmente la distribución de una primera dosis, porque es altamente probable que se logre un mayor impacto a corto plazo en la salud pública, y se reduzca así el número de muertes previsibles por la COVID-19", afirmó el Comité Conjunto de Vacunación e Inmunología (JCVI, en sus siglas en inglés) de Reino Unido.

Esta decisión, difícil de tomar y a la que la mayoría de países renuncian, está aconsejada por los expertos. En una carta publicada en la revista científica The New England Journal of (NEJM) Medicine, Danuta Skowronski, jefa de Epidemiología de Influenza y Patógenos Respiratorios Emergentes del British Columbia Centro de Control de Enfermedades (BCCDC) de Canadá y Gaston De Serres, epidemiólogo del Instituto Nacional de Salud Pública de Québec, instaban a los gobiernos a retrasar la administración de la segunda dosis y dar prioridad a la primera por la escasez existente.

"Con una primera dosis tan protectora, los beneficios derivados de un suministro escaso de vacuna podrían maximizarse aplazando las segundas dosis hasta que a todos los miembros del grupo prioritario se les ofrezca al menos una dosis", explicaban. "La administración de una segunda dosis dentro de un mes después de la primera, como se recomienda, proporciona poco beneficio adicional a corto plazo", añadían.

El plan de desescalada de Johnson

Boris Johnson, dentro de su estrategia para acabar con la pandemia en Reino Unido, tras unas semanas complicadas, va a anunciar un plan para levantar el confinamiento, que se espera que sea el último, y que incluirá la reapertura de los colegios. Desde principios de enero el país quedó confinado por la mala tendencia de contagios y fallecidos por coronavirus.

Algo más de un mes después, el confinamiento y la vacunación han surtido efecto y las cifras de contagios, muertos y hospitalizaciones han caído. Por ello, esta tarde se hará oficial el plan de medidas de desescalada, que el propio Johnson ya adelantó que será "prudente" y "progresivo".

Los colegios abrirán a partir del próximo 8 de marzo. "Nuestra prioridad siempre ha sido que los niños regresen a los colegios, lo que es crucial para su educación así como para su bienestar mental y físico", dijo Johnson.