LOTERÍA NAVIDAD 2020

Arruinados tras ganar el Gordo

Ricardo Rubio - Europa Press - Archivo

Ser ganador de uno de los grandes premios de la lotería supone una gran alegría, pero una mala gestión del dinero puede desembocar en una delicada situación.

El Sorteo de Navidad se acerca y en él ponen su esperanza millones de españoles tras un año marcado por las complicaciones económicas derivadas del coronavirus. Si otros años ya suponía una tremenda alegría hacerse con uno de los premios que reparten los bombos de la lotería, este lo es todavía más.

Con los 400.000 euros de premio al décimo en el caso de resultar ganador de El Gordo son muchas las cosas que se pueden hacer. Sin embargo, es precisamente por eso por lo que hay que tener mucho cuidado. El hecho de verse con tal cantidad de dinero puede nublar la vista y la mente de los premiados. No han sido pocas las personas que, tras convertirse en millonarios, lo perdieron todo en apenas uno años.

Inversiones que resultan fallidas, viajar alrededor del mundo o el despilfarro descontrolado de dinero son algunos de estos casos que acaban con un triste final. Según el Fondo Nacional para la Educación Financiera (NEFE), el 70% de los ganadores se 'funden' el premio en apenas cinco años.

El juego, un peligro para los nuevos millonarios

Evelyn Marie Adams, estadounidense y trabajadora en una tienda 24 horas, ganó grandes premios en dos ocasiones. Agobiada por las peticiones de dinero de familiares y amigos tuvo que escapar de su ciudad natal. La ludopatía se llevó gran parte de su dinero en los casinos de Atlantic City, dejándola arruinada y con dos trabajos para mantenerse. Tras ello, recomendó a los ganadores que contactaran con un abogado y un contable para manejar la situación.

Otro caso conocido es el de Andrew Jack Whittaker Jr., un empresario de la construcción que, a sus 55 años, ganó 314 millones de dólares. Eso, sumando a una gran fortuna que ya estaba en su poder. En esta situación, el ganador empezó donando parte del premio a obras benéficas. Sin embargo, la cosa se fue torciendo con una serie de catastróficas desdichas: intentos de robo, un divorcio, la muerte en extrañas circunstancias de su nieta... Y finalmente, el alcoholismo y, de nuevo, el juego: el casino Caesars Atlantic City le demandó por rebotar cheques por valor de 1,5 millones de dólares para cubrir pérdidas del juego.

Despilfarro de dinero sin control

Adrian y Gillian Bradford ganaron 148 millones de libras (187 millones de euros) y su vida cambió por completo. Viajes alrededor del mundo con todos los lujos, casa nueva y coches de alta gama. Sin embargo, esto no duró mucho y tampoco aumentó la felicidad esta pareja británica, que se divorció a los 15 meses después de los rumores infidelidades. Para colmo, no acabaron bien con la familia: aseguraban que, por mucho que dieran, siempre les pedían más.