Un 43% de los españoles, a favor del confinamiento total si se descontrola la ola de otoño

Un 43% de los españoles estarían a favor de un confinamiento general en caso de que "se produzca un segundo brote generalizado de COVID-19", según muestran los resultados del estudio Cosmo-Spain, coordinado por el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) e impulsado por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Sin embargo, esta no es la medida más aceptada por los encuestados. Un 63% de ellos piensa que hay que "unificar la normativa y las restricciones a nivel nacional", mientras que un 62% defiende el confinamiento de las zonas más afectadas por los contagios. Por último, un 50% aprobaría la proclamación del Estado de Alarma en todo el territorio nacional.

El estudio, en el que han participado 1.057 personas mayores de 18 años y residentes en territorio español, expone el planteamiento de los encuestados respecto a varios factores relacionados con la pandemia, como la preocupación por el virus, su percepción de seguridad o cuestiones relacionadas con la vacunación.

Preocupación

El nivel de preocupación, si bien sigue siendo elevado, ha descendido respecto a la anterior ronda del estudio. Mientras que en la primera ronda solo a un 10,4% le importaba "poco o nada", ahora eligen esta opción un 13,3%. Sin embargo, un 59% muestran "mucha o muchísima preocupación".

Por otro lado, la principal preocupación de los encuestados a nivel social es la saturación de los servicios sanitarios, seguido de la gente que va sin mascarilla. Ambas se sitúan por encima de un 80%. Les siguen un nuevo confinamiento, la salud mental o el no poder afrontar el pago de las facturas, todas ellas rondando el 60%.

Percepción del riesgo de contagio

Un 47% del sondeo piensa que lo peor de la pandemia está por llegar, mientras que un 31% considera que lo peor lo estamos viviendo ya. Además, más de un 78% piensa que el coronavirus se está expandiendo rápidamente.

Se ha producido un descenso respecto del estudio anterior en la gravedad que tendría la enfermedad en caso de contraerla. Un 39% (4 puntos porcentuales menos) de los españoles piensan que enfermarían "gravemente o muy gravemente". Además, un 75% considera que hay mayor riesgo de contagio en los espacios cerrados.

Cuarentenas y conocimiento de los protocolos

El 95% de la población sabe que se tiene que quedar en casa si presenta algún tipo de sintomatología compatible con la enfermedad.

Por otro lado, en caso de ser contacto estrecho de un positivo, el 74% se pondría en contacto con el Centro de Salud, mientras que un 54% se aislaría preventivamente. Un 17% de los encuestados se aislarían de la sociedad, pero no se sus familiares y un 12% seguirían con su vida de forma natural.

La población, por regla general, considera que es fácil acceder a la información relacionada con el coronavirus. Un 78% de los sondeados se situarían en esta franja y, de ellos, un 80% además manifiesta que le resulta sencillo entender las recomendaciones.

Vacunas

Ha descendido drásticamente el porcentaje de personas que se vacunarían "si estuviera disponible un fármaco mañana mismo". En la primera ronda del sondeo, un 70% de los encuestados se vacunarían inmediatamente, mientras que ahora solo lo harían un 43%. Los motivos para no hacerlo, principalmente, son los efectos secundarios que pueda presentar (59%), esperar a más tandas de vacunas para garantizar su seguridad (37%) o, directamente, la creencia de que la vacuna "no es eficaz" (16%).

Confianza en las instituciones

Los encuestados confían más en las instituciones sanitarias que en las políticas. Un 69% confía en los científicos, un 58% en los hospitales y un 54% en los centros de salud. Sin embargo, la confianza en el Ministerio de Sanidad y en las comunidades autónomas se sitúa en un 42% y un 39% respectivamente.

Solo un 8,3% de los encuestados está "poco o nada de acuerdo" con llevar la mascarilla obligatoriamente y un 9,8% eligen la misma opción cuando se les pregunta por las restricciones de aforo en los locales de hostería. Estas medidas, junto con las restricciones en los locales de ocio, son las que más apoyo han tenido en la población. Sin embargo, la libertad de movimiento entre países o el depósito de confianzas en las comunidades autónomas para que las competencias en las normativas sea suya es rechazado por un 48,7% y un 32,6% respectivamente. Solo un 22% de la población está en desacuerdo con la prohibición de fumar en la calle.