La tercera entrega de 'Informe COVID' versó sobre la gestión de la pandemia que se ha realizado en España. El programa dirigido por Iker Jiménez reunió a diversos expertos que analizaron la enorme incidencia que está teniendo en nuestro país la enfermedad durante la segunda ola.

Para intentar explicarlo, el presentador comenzó haciendo una comparación con uno de los países con más similitudes de nuestro entorno: Italia. La nación transalpina fue duramente golpeada por la pandemia, pero ahora está siendo uno de los territorios que mejor está gestionando la situación.

Las medidas en Madrid

El primer especialista en participar fue Daniel López Acuña, epidemiólogo y exdirector de Acción Sanitaria en Situaciones de Crisis de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Afirmó rotundamente que "las medidas tomadas en Madrid llegan tarde, son insuficientes. Deberían tener más contenido de salud pública y menos de restricción y vigilancia policial. De poco sirve el sólo sellar las zonas que tuvieron más de 1.000 casos por 100.000 habitantes. Si no es modificado en los próximos días, vamos a ir de lleno a una situación que derivará en el confinamiento pleno".

Además, aseguró que "creo que las medidas son de tres tipos: primero, una gran diseminación pedagógica para que la población deba moverse lo menos posible exista o no la disposición del confinamiento; segundo, instrumentar las restricciones, los límites en los aforos, todas las medidas restrictivas para que exista un efecto verdadero unificado para reducir la transmisión; y tercero, correr a toda velocidad para reforzar la capacidad de diagnóstico precoz y de atención primaria".

En su opinión, eso puede explicar que "Asturias tiene una presión asistencial del 3% y Madrid de más del 30%. Es una situación seria. Incluso aunque no tenga la severidad de muertes y hospitalizaciones de la primavera, amenaza con tenerla. El virus está ahí y no podemos reanudar formas de vida habituales, sino que debemos estar protegidos y con conciencia de proteger a los demás".

¿Qué hemos hecho mal?

Tomás Camacho, jefe del servicio de Análisis Clínicos de Laboratorios Vithas Lab, declaró que "resulta casi obsceno repasar las cifras de fallecidos que tenemos en España. Cuando lo comparamos con otros países, como Grecia, resulta llamativo. En nuestro país son más de 31.000 muertes oficiales, y allí, 100 veces menos".

Por su parte, César Carballo, médico adjunto del servicio de Urgencias del Hospital Ramón y Cajal de Madrid, giró la conversación hacia las aguas residuales: "A mediados de agosto, había estudios en los que ya saltaban las alarmas y los indicadores estaban en rojo, pero no se hizo nada".

Asimismo, fundamentó cinco pilares básicos a la hora de desescalar: conocimiento de la infección, participación de la comunidad, capacidad de salud pública, capacidad del sistema de salud y controles fronterizos.

Poco liderazgo político

José Miguel Gaona, psiquiatra forense, enfatizó que "nuestros políticos y algunas autoridades sanitarias han hecho propaganda más que informar. Por ello, debería existir un comité de expertos que vayan tomando decisiones dinámicas en función de la situación y no estáticas".

Rápida desescalada

Juan González Armengol, jefe de la Unidad de Urgencias del Hospital Clínico San Carlos de Madrid y presidente de la Sociedad Española de Medicina de Urgencias, opinó que "hemos hecho una desescalada más rápida y probablemente, hemos gestionado mal la movilidad, porque no es igual la de Asturias que la de Madrid".

Para Camacho, "el virus no se combate en la UCI. Se combate en la calle y en los centros de salud. Existe un axioma en salud pública que dice que los epidemiólogos deben ir de la mano de los especialistas de familia".

Asimismo, quiso recalcar que "es un problema de base, es estructural. Faltan médicos de familia y especialistas en salud pública y en esta situación nos ha cogido la pandemia".

La importancia del volcado de datos

González Armengol destacó que una de las dificultades añadidas está relacionada con "la arquitectura y el volcado de datos, que en la administración española es lamentable. Es uno de los factores más importantes, y se debe hacer una comunicación online. Es uno de los defectos más grandes con los que se han encontrado las autoridades".

Por eso, insistió en que la aplicación Radar COVID debería "ser obligatoria para todo el mundo y llevar la comunicación. Estamos hablando de una pandemia que se está comiendo nuestro país y debería establecerse su uso".

Subrayó que las medidas que se deben tomar "tienen que ser consensuadas por dos administraciones. No lo van a hacer ellos solos, sino millones de personas. Si los mensajes son cruzados, existe desconcierto y eso no debe ocurrir".