Conducir siempre ha requerido una especial precaución para no sufrir ningún accidente. No obstante, muchos conductores ignoran en ocasiones las reglas o simplemente se despistan, pudiendo ocasionar accidentes muy graves. Para evitar esto lo máximo posible, la Dirección General de Tráfico ha implantado una última medida que se va a desplegar totalmente en la segunda fase de la Operación Salida, este agosto, en las comunidades en las que tiene competencia, es decir, toda España excepto Cataluña, País Vasco y Navarra.

El organismo ya utilizaba radares, helicópteros e incluso drones, pero ahora ha añadido unas furgonetas camufladas que han estado en fase de pruebas durante los últimos meses y que ya están activas. No será fácil vislumbrar estos vehículos, por lo que obligará a los conductores a ir con mayor cuidado. Aunque los más avispados podrán darse cuenta si se fijan en algunos detalles.

¿Cómo son estas furgonetas?

Las furgonetas, por lo general son blancas, aunque también las hay de otros colores, y suelen ser anónimas, es decir, no llevan ningún rótulo publicitando la actividad que desarrolla ni figura la razón social del negocio. Además, suelen contener dos ocupantes uniformados, estando el copiloto especialmente atento a lo que ocurre alrededor. Otra pista puede ser que una de las personas que viajen en el interior de la furgoneta portará una cámara y tendrá capacidad para multar a aquellos que cometan una infracción. La elección de las furgonetas para vigilar no es algo casual. Han sido elegidas por tratarse de un vehículo más elevado que un coche, lo que otorga una mayor visibilidad y eficacia para grabar las imprudencias.

La forma de trabajar de estas furgonetas es la siguiente. Cuando los agentes pillan a un conductor cometiendo una imprudencia graban la infracción. A continuación, contactan con los compañeros situados en un control o, si no lo hay, con la patrulla que circula detrás de la camioneta, a quienes facilitan la identificación del vehículo y la infracción cometida. Esta patrulla dará el alto al conductor y le impondrá la correspondiente multa.

¿Qué multas pueden poner?

La mayoría de los conductores son sancionados por el uso inadecuado de sus dispositivos móviles (teléfono y navegador), pero también caen aquellos que conducen con los auriculares puestos, comiendo y bebiendo o que no llevan el cinturón de seguridad, principalmente. Tanto el uso del móvil al volante como no llevar puesto el cinturón de seguridad son infracciones graves y conllevan una multa de 200€ y la pérdida de puntos del carné de conducir. Además, la DGT planea endurecer las sanciones por el uso del teléfono móvil.

Se están probando motos

Además de las furgonetas, la DGT ha comenzado a probar en Galicia un sistema de vigilancia con motos camufladas, centrando la atención en los excesos de velocidad de los motoristas y en la conducción después de haber tomado alcohol. Así, los agentes, vestidos de paisanos y con motos sin ningún tipo de distintivo, se infiltrarán en los grupos de moteros y acudirán a los tramos habituales en los que se suelen cometen esos excesos. Según se ha informado la red Social Drive, los dos modelos de moto que están utilizando los agentes son la Honda ST 1300 y la BMW R1150 RT, de color negro y gris respectivamente.