Coronavirus

Un alcalde peruano finge estar muerto para no ser arrestado tras incumplir el confinamiento

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El regidor del distrito de Tantará decidió esconderse en un ataúd con el objetivo de hacerse el muerto por el coronavirus y evitar ser sorprendido por la policía bebiendo fuera de su domicilio.

La mayor parte de los países del mundo han aplicado medidas para frenar la expansión de la pandemia del coronavirus. El confinamiento se ha mostrado efectivo en este sentido y ha sido empleado en multitud de lugares. Su aplicación afecta a todos los ciudadanos, pero siempre hay quien no respeta las normas. A veces incluso son las autoridades las que las incumplen.

El último ejemplo de ello ha sucedido en Perú y ha tenido como protagonista al alcalde del distrito de Tantará, localidad ubicada en la región de Huancavelica. Dicho regidor, de nombre Jaime Rolando Urbina Torres, tuvo la ocurrencia de salir a a beber el pasado lunes por la noche con unos amigos, a pesar de que la nación sudamericana ha impuesto el confinamiento en todo su territorio a causa de la COVID-19.

Quejas de los vecinos

El plan no le salió como esperaba y acabo siendo detenido por la policía después de que los vecinos de la zona alertaran del ruido que se escuchaba. Pero antes de verse con las esposas puestas, y para evitar ser sorprendido cometiendo esta actividad, intentó esquivar a su destino de una manera sorprendente: se escondió dentro de un ataúd con la mascarilla puesta para hacerse pasar por una de las víctimas del coronavirus.

La treta de hacerse el muerto no tuvo éxito y el alcalde de Tantará, junto a sus acompañantes, que también realizaron la misma infructuosa operación, acabaron en comisaría por incumplir el confinamiento. Todos ellos dieron positivo en las pruebas de alcoholemia. El comportamiento del regidor ya había sido puesto en duda en anteriores ocasiones por los vecinos de esta población peruana. Así, este mismo mes de mayo le acusaron de haber pasado sólo ocho días en Tantará desde que comenzó la pandemia de la COVID-19.