CORONAVIRUS

Se buscan voluntarios para infectarse con el coronavirus

La Universidad de Oxford ya está probando en humanos una de las vacunas que más avanzada está, pero si el confinamiento sigue, podría quedarse sin sujetos para la fase III.

Por increíble que parezca, el problema a la hora de encontrar una vacuna contra el coronavirus podría estar en la propia efectividad de la lucha contra la pandemia, en el éxito de las medidas de confinamiento para detener su propagación. Hasta seis proyectos tienen visos de obtener en poco tiempo una vacuna fiable para la COVID-19, entre ellos el de la Universidad de Oxford que ya está en la fase I de pruebas en humanos, tras obtener estupendos resultados con macacos.

Pero el problema puede llegar en la fase III, la más amplia de todas, en la que pueden hacer falta miles de individuos para asegurarse de que la vacuna es efectiva y no genera efectos secundarios. A un grupo se le administra la vacuna, a otro un placebo u otra vacuna común no relacionada (los individuos no saben cuál se les ha inyectado, para evitar sesgos) y a partir de ahí se espera a que lleguen los contagios de manera natural para observar la eficiencia de la vacuna. Pero si no la enfermedad desaparece de la calle, si no hay transmisión natural, no podría probarse la eficacia de la misma, al no tener los inyectados con el placebo más opciones de infectarse que los vacunados.

La solución para esto podría ser lo que se conoce como Human Challenge Trials, o lo que es lo mismo, ensayos clínicos con humanos. Se trataría de buscar voluntarios para vacunarles y, después, inyectarles el virus para comprobar su eficacia; con unos cien individuos bastaría y acortaría mucho los plazos de prueba de la vacuna.

El dilema es evidente: se trataría de infectar a personas con COVID-19, un virus que está provocando graves problemas de salud o incluso la muerte. Algunos científicos defienden esta técnica, al considerarlo un riesgo aceptable para acortar plazos y reducir la mortalidad a nivel mundial, en lo posible. Aunque es poco probable que se lleve a cabo en el corto plazo, debido a que no existe tampoco un tratamiento específico y muy eficaz contra el coronavirus, lo que aumentaría el riesgo de los voluntarios. Aunque por voluntarios no será: una iniciativa digital ya tenía a 10.000 procedentes de más de 50 países hace ahora un mes.