Pau: “Creo que Kobe me visitó en los Juegos para ablandarme”
‘Netflix’ estrena el documental sobre la vuelta a la grandeza de la selección de EE UU: ‘The Redeem Team’. En él se recuerda la mentalidad de Kobe.
Netflix tiene a punto una nueva bomba para todos los aficionados al baloncesto. Produce Jon Weinbach, el hombre detrás del éxito de The Last Dance, el megadocumental sobre Michael Jordan que fue un éxito extraordinario en la primavera de 2020, cuando el deporte (y el mundo) paró por la pandemia de coronavirus. Este nuevo producto se llama “The Redeem Team” y narra la forja de ese equipo, el de la redención, de la Selección de Estados Unidos. El que devolvió el oro, la gloria y la mística a una selección vapuleada por varios desastres: el Mundial 2002, los Juegos de Atenas 2004 (por encima de todos por la resonancia olímpica), el Mundial de Japón 2006…
Con Mike Krzyzewski como entrenador (ya dirigió al equipo en el amargo bronce de Saitama), Estados Unidos se preparó para recuperar la imagen, la ética de trabajo y el polvo de estrellas que se había perdiendo, por un problema de ausencias y de mala cultura, desde los tiempos intocables del inolvidable Dream Team de Barcelona 92. Dicho y hecho, EE UU cambió su forma de trabajo, se lo tomó de verdad en serio y logró el compromiso de un bloque de jugadores que formaban el equipo de baloncesto más increíble que se había reunido desde aquel de Barcelona que lideraban Michael Jordan, Magic Johnson y Larry Bird. En 2008, en los Juegos de Pekín, primera cita de la redención, estaban: Carmelo Anthony, Carlos Boozer, Crish Bosh, Kobe Bryant, Dwight Howard, LeBron James, Jason Kidd, Deron Williams, Chris Paul, Tayshaun Prince, Michael Redd y Dwyane Wade. El Redeem Team.
España, la gran piedra en el camino
Estados Unidos arrasó en Pekín… hasta la final, donde sufrió contra la Selección española (118-107) en lo que para muchos es el mejor partido de la historia del baloncesto FIBA. El Team USA ganó sus ocho partidos, en la fase de grupos por una diferencia media de 32,2 puntos, incluida una paliza a España (82-119) que no presagiaba la igualdad y la tensión que hubo luego en la lucha por el oro.
Uno de los adelantes que ya hemos podido ver del documental se centra en el inicio de ese primer duelo con España, un partido que los estadounidenses tenían entre ceja y ceja porque la Selección liderada por Pau Gasol era vigente campeona del mundo y la otra gran favorita al oro. El propio Pau, que por entonces era compañero de Kobe Bryant en los Lakers, donde había llegado ese año y había alcanzado una Final de la NBA en la que perdieron con los Celtics como antesala de sus dos anillos juntos (2009 y 2010), recuerda cómo fueron las horas previas a ese partido y cómo era la mentalidad de su gran amigo, el malogrado Kobe: “Antes del partido, Kobe me hizo una visita cuando la Selección estadounidense vino a la Villa Olímpica. Mi hermano mayor venía a verme y mis compañeros de Selección estaban alucinando, ‘guau, Kobe está en nuestro apartamento, qué pasada’. En realidad, yo creo que era parte de su estrategia para ablandarme”. El propio Kobe esperaba así aquel momento: “España es el actual campeón del mundo, los dos estamos invictos... este es el partido que todo el mundo quiere ver. Pau y yo somos como hermanos, estamos muy unidos. Me alegró mucho de que esté jugando a un nivel tan alto, se me va a hacer rato competir contra él”.
En la primera jugada del partido, Pau Gasol va a poner un bloqueo para liberar a Rudy Fernández y Kobe le embiste con sobredosis de fuerza y envía al pívot español al suelo: “Vino a por mí directo, me empujó en el pecho y tiró al suelo. Era un mensaje, no solo para mí sino para su propio equipo: ‘Eh, este puede ser mi hermano, juega en mi equipo y es mi amigo. Pero lo único que me importa es ganar”.
Kobe era un jugador esencial en el Redeem Team, uno con una enorme ascendencia sobre los LeBron, Wade, Carmelo… estrellas más jóvenes y que estaban tomando el relevo en el firmamento de la NBA. Así lo recuerda LeBron: “Kobe nos dijo, ‘voy a atravesar a Pau por el puto pecho’. Nosotros le dijimos que estaba loco, que era su compañero de equipo. Y lo hizo y fue como joder, si le hace eso a su propio compañero de equipo... Dios, no íbamos a perder ese partido. Íbamos a machacar a España”. Chris Bosh añade: “Estábamos alucinados, pero nos dijo ‘ahora, este no es mi compañero. A tomar por culo, que se levante’”. Carmelo Anthony asegura que esa era “la energía” que necesitaba su selección y Wade también sonríe al recordar aquella acción: “Nos dijo que en la primera jugada iba a ir contra Pau. Que sabía lo que lo iban a hacer ellos, sabía que Pau iba a poner el último bloqueo y dijo ‘voy a ir a por ese cabrón’”.