El 0-4 ante Dallas Mavericks ha provocado un terremoto en L.A. El equipo tiene que afrontar un difícil futuro sin Phil Jackson y con un equipo en el que ocho jugadores superan la treintena y tienen contratos en vigor. En paralelo, Dwight Howard apunta a capitalizar rumores en el mercado porque le quedan dos años con Orlando Magic y todo apunta aque su ciclo en Florida podría estar tocando a su fin. La decepción de Orlando Magic y la decepción de Los Angeles Lakers se combinan para apuntar a un rumor obvio: Dwight Howard es el gran objetivo de los Lakers para renovar un roster que ha parecido agotado a lo largo de esta última temporada.

En la operación entrarían Andrew Bynum y Pau Gasol. A partir de ahí comenzarían los ajustes salariales. Orlando incluiría con seguridad el enorme contrato de Gilbert Arenas, que ha fracasado en los Magic. El planteamiento es el siguiente: Orlando podría asumir que Howard no va a seguir y plantearse un traspaso antes de perder a su jugador franquicia a cambio de nada. Desde ese punto de vista, pocas ofertas serían más tentadoras que recibir a Pau Gasol, al que todavía le quedan años en la elite, y a un Bynum que con 23 años puede ser uno de los grandes pívots de la liga... si se asume el riesgo que implican sus rodillas, que le han lastrado en las últimas temporadas. Los Lakers por su parte recibirían a un Howard ideal para realizar la transición entre presente y futuro. Un jugador con el carisma de las grandes estrellas que reclama el Staples y una alternativa deportiva que permita un último asalto todavía con Kobe Bryant y un buen futuro más allá del escolta.

Por ahora, sólo son rumores, que irán a más en los próximos días, en los que se producirán las reuniones entre directiva y jugadores para analizar el futuro de la franquicia. Un futuro en el que sólo hay una cosa segura: será sin Phil Jackson.