Eslovenia entra, como casi siempre, en las quinielas para luchar por las medallas, pero había dudas sobre cómo llegaba al Eurobasket.

Tuvimos una buena preparación, pero la lesión a pocos días del comienzo de Beno Udrih trastocó algo los planes.

Podríamos calificarle de alma del equipo

No sé si el alma, pero desde luego uno de los jugadores más desequilibrantes. Estábamos adaptados a jugar con él y ahora hay que buscan otras alternativas, que giran en torno a Jaka Lakovic.

Usted, personalmente, ¿cómo se encuentra?

Cada vez mejor. Los dos primeros partidos sirven para coger confianza, para acostumbrarse al exigente ritmo de un campeonato de este calibre.

España es el rival ante el que cierran esta fase. ¿Algún miedo o preocupación?

Miedo, ninguno, aunque se trata de una de las candidatas a luchar por el título. Es una generación de muchos éxitos y es el equipo con más talento del Europeo.

El Eurobasket copa su cabeza, pero es uno de los nuevos fichajes del Barça y hay que preguntarle por la próxima temporada.

Hemos ganado la Liga, pero revalidar título no será fácil. Todos se han reforzado bien, como por ejemplo el Madrid.

Que tiene a Messina, su entrenador este año en Moscú.

Eso es una razón más para ver lo complicado que va a resultar ser campeones.