El Akasvayu Girona ha obtenido esta noche un triunfo en la pista del Hemofarm Stada (71-80) con el que se posiciona como el máximo favorito para acceder a la final a ocho de Turín.
Después de llegar a disfrutar de una cómoda ventaja de quince puntos en el tercer cuarto (55-70), en los últimos diez minutos el equipo catalán estuvo inoperante ante la canasta rival. En los primeros siete minutos sólo anotó dos puntos y tuvo suerte del desacierto del rival.
El Girona arrancó bien el partido y tras un triples de McDonald en el minuto 4 ya dominaba de seis puntos el tanteador (5-11), idéntica diferencia que alcanzó tras una canasta de Branko Cvetkovic (9-15), tres minutos después. El mismo jugador, tras un triple, puso la máxima del partido hasta entonces (10-19), aunque un parcial de 9-0 situó la igualdad en el tanteador (19-19), que también se reflejó al final de los primeros diez minutos (21-21).
En el segundo periodo, el partido se mantuvo igualado y sólo hubo ventajas como máximo de dos puntos, hasta un 43-39, tras una canasta del local Miljan Pavkovic. Este período también concluyó con igualdad (43-43), mientras que en el tercero el conjunto catalán se destapó.
Un primer parcial de 0-7 (43-50) y otro a continuación de 0-10 dejó el partido muy decantado para el Girona, ya que había alcanzado la máxima hasta entonces, de quince puntos (55-70), gracias a dos lanzamientos de San Emeterio.
En el cuarto período, Rawle Marshall, el jugador más efectivo del partido (21 puntos), se jugó un triple para dejar el marcador en un 61-70. Gasol anotó dos puntos, que fueron los únicos del Akasvayu en los primeros siete minutos. Fueron momentos de mucha tensión, ya que el acierto había desaparecido, aunque también en el bando rival, en el que un triple de Macvan (65-72) y una nueva canasta ponían un preocupante 67-52.
Finalmente, los puntos de Sada y Daniels auparon a un Akasvayu que había perdido las formas cuando había hecho el gran esfuerzo de abrir una brecha de quince puntos. Al final, un 71-80 en la ciudad serbia de Vrsac deja al Akasvayu casi con los dos pies en la final a ocho de Turín.
