En esta ocasión, Navarro (30 puntos, seis asistencias y dos rebotes) estuvo acompañado de un eficaz Gregor Fucka, que volvió a ser el de las grandes noches, y esto provocó que Denis Marconato fuera infranqueable bajo su tablero, logrando dobles figuras (doce puntos y doce rebotes), ante la desesperación y bajo nivel de agresividad de la batería interior gerundense.

Los azulgrana, que en el primer minuto de juego perdían al base Milos Vujanic, que se resintió de la lesión sufrida en la rodilla izquierda, salieron a dilucidar el compromiso por la vía rápida, con un rotundo 24-11 en el primer cuarto, incluidos doce puntos de Navarro.

En sólo diez minutos, los locales parecían tener encauzado el partido. Más aún cuando Fucka ampliaba la brecha (29-14) en los inicios del segundo cuarto. Entonces Dusko Ivanovic dio descanso a Navarro, y Thornton entró en su lugar. El Barcelona bajó la guardia y las acciones de Terrey Myers, junto a un eficaz Raúl López, redujeron las diferencias casi al mínimo al descanso (42-39).

El desconcierto de los barcelonistas siguió en los comienzos del segundo tiempo. Cinco puntos consecutivos de Dainius Salenga dieron la vuelta al marcador (46-48, m.24). Pero ahí surgió de nuevo Navarro que, después de que Basile empatase (48-48), anotó dos triples consecutivos para redondear un parcial de 8-0 que cayó sobre los gerundenses como un jarro de agua fría (54-48, m.26).

El Barça sentencia

Edu Torres, técnico del Akasvayu se vio venir el desastre y pidió un tiempo muerto para serenar a sus jugadores, ya muy 'tocados' por el repentino parcial azulgrana. Sin embargo, la dinámica no varió. Fucka, Marconato y Navarro superaban una y otra vez la defensa visitante, y el tercer cuarto se cerró con una cómoda ventaja (66-56).

Ni el retorno de Salenga, ni la entrada de Kammerichs para dar más garra al juego ofensivo gerundense, cambió las cosas en un partido en que los hombres interiores del Akasvayu (Fran Vázquez, Kevin Thompson, German Gabriel y Roberto Dueñas) tuvieron su noche.

Ello fue decisivo en el pobre bagaje de once puntos que anotó el Akasvayu en el último cuarto, en el que los azulgrana lograron su máxima ventaja con el triple de Basile que estableció el resultado final (90-67).