Solo Márquez puede con Márquez

El mayor enemigo de Marc Márquez en la presente temporada de MotoGP se llama Marc Márquez. Sólo él puede perder el Mundial. Y el domingo, en Austin, demostró por primera vez cómo puede hacerlo. Una caída por un fallo propio, cuando encabezaba con solvencia la carrera larga del GP de las Américas, dejó en bandeja la victoria para Francesco Bagnaia, su rival teórico por el título, y el liderato para su hermano Álex, su rival real con las matemáticas en la mano. Al menos hubo una alegría en la casa de los Márquez. Los ceros penalizan mucho en el Campeonato, y Marc ya ha firmado el primero de este curso, mientras que sus dos oponentes se mantienen en pie. Álex Márquez recoge así el fruto de su regularidad, pleno de segundos puestos en seis carreras, para saborear la primera posición de la máxima categoría, aunque solo sea por un punto.

El accidente de Marc cambió completamente el guion del fin de semana, que apuntaba al tercer doblete consecutivo del piloto de Ducati Lenovo en un circuito que siempre le había sido favorable. Ganó la esprint, hizo la pole... pero falló en el remate. El Mundial se dota así de una emoción inesperada, porque ahora da alas al bicampeón Bagnaia, abrumado hasta la fecha por el dominio inaccesible de su compañero de equipo. En el fondo, Pecco sabe que el triunfo ha venido heredado por un error de Marc, que si su rival continúa igual no tendrá nada que hacer, pero también le ha inyectado una buena dosis moral por el cambio de tendencia. Incluso puede pensar que fue su presión la que provocó la caída del español. La perspectiva del italiano ha girado por completo. Y también la del Campeonato. Todavía restan 19 grandes premios, muchísimos, pero a partir de ahora se afrontarán con el convencimiento de que el campeonísimo Márquez no es infalible.

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