Málaga disfruta con La Roja y desea repetir

Ambiente sensacional. De lujo. Los alrededores de La Rosaleda de color rojo con camisetas de muchas épocas. Aunque el nombre más visto en las espaldas del respetable era el de Isco, también pudimos ver a Casillas, Xabi Alonso, Iniesta y demás ídolos de siempre. La organización, impecable con el valioso trabajo de los empleados del Málaga Club de Fútbol.

El público no paró de animar a la Selección tanto con gritos de “¡España, España!” como con el autóctono y sentido “¡Málaga, Málaga” a pesar de los disgustos que el equipo andaluz lleva dando a sus pacientes sufridores de un tiempo a esta parte. Málaga ha demostrado una vez más que está muy preparada para acoger eventos de gran envergadura. 30.389 espectadores. Entrada colosal. Y ni un incidente antes, durante y después del partido.