Hay que ser justo... y parecerlo

Con el Barça ya eliminado de la lucha por la Liga y Xavi anunciando su adiós, no hay que descartar que las aguas se serenen. Tampoco que el equipo azulgrana se vea beneficiado en los próximos partidos, ahora que ya está despeñado y después de que su entrenador haya comunicado que lo deja a final de temporada. Creo que Xavi se ha equivocado en algunas declaraciones sobre los árbitros, pero lo que ha pasado en las últimas jornadas quedará como un baldón en un estamento que debería impartir justicia con una venda sobre los ojos, es decir, sin tener ojeriza. Mourinho llegó a rajar lo que no está escrito sobre los árbitros y nunca se le pasó factura. No lo permitiría su Brunete mediática. Sin embargo, cada vez que el técnico de Terrasa levanta los brazos ve una tarjeta, cada vez que se rearbitra una jugada decisiva, el Barça es el perjudicado y el Madrid beneficiado. Son ya demasiadas veces. Su contraplano gritando “Vergüenza” es elocuente. No hace ni una semana del atropello sufrido por el Almería en el Bernabéu. Ahora, a diez puntos de la Liga, el VAR puede que cambie el criterio. Llegan los partidos de la basura y hay que maquillar la estadística.

Xavi ha anunciado su adiós porque entiende que su equipo está padeciendo una persecución por su culpa. No sólo él debe hacer examen de conciencia.