El Efes puso los líderes

La temporada de baloncesto 2020-21 arrancó con la sensación de que la historia le debía una Euroliga al Efes de Estambul. Ya había jugado la última final en 2019, que perdió de ley ante el CSKA de Moscú. Pero la deuda no venía de entonces, sino del año pasado, cuando la pandemia dejó desierto el campeón. La historia devolvió la oportunidad al rodillo turco, que la ha aprovechado a tiempo, antes de que uno de sus dos líderes, Vasilije Micic, vuele a la NBA. El otro es Shane Larkin. Ambos tuvieron una actuación estelar cuando se espera que la tengan, en la finalísima. Micic: 25 puntos y 28 de valoración, MVP de la liga regular y MVP de la Final Four. Larkin: 21 y 28. Dos líderes sobresalientes que encabezaron un gran bloque para conquistar la primera Euroliga del Anadolu Efes. Merecidamente, hay que decirlo.

El Barça fichó en las dos últimas campañas a dos jugadores para asumir ese mismo liderazgo. Para reconquistar Europa. Y ninguno de ellos tiró este domingo del carro. No lo hizo Nick Calathes, que acabó el partido en números negativos, condicionado por la inoportuna lesión que sufrió en la semifinal ante el Milán. Ni tampoco Nikola Mirotic, que llegó al descanso con cero puntos y -5 de valoración. Luego lo enmendó en algunas fases, pero no fue suficiente. Estas carencias se suplieron con los tres estadounidenses: Cory Higgins, Brandon Davies y Kyle Kuric. Muy competitivos. También con Leandro Bolmaro, aplicado en defensa. Y con Pau Gasol desde una perspectiva más espiritual, sin estadística pero con arrojo. Mordía por cada balón. El equipo de Sarunas Jasikevicius tiene tantas alternativas que mantuvo su chance hasta la conclusión. Pero faltaron los dos fichajes estrella, esa es la realidad. La tercera Euroliga del Barcelona tendrá que esperar, como mínimo otro año. Estas finales también curten. Y quizá la historia devuelva un título que esta vez no pudo rematar. Como sucedió con el Efes.