El Atlético realizó un buen partido ante el Barcelona, sobre todo en el primer tiempo. Entonces se vio un equipo atrevido, dinámico, con llegadas, siempre con sensación de peligro. Mereció el equipo de Simeone irse al descanso por delante en el marcador. Luego el juego se igualó, pero el Barcelona nunca dio la sensación de agobiar al equipo del Cholo. Sucedió lo que le ha venido ocurriendo al Atlético a lo largo de la temporada. Le falta gol. Parece mentira que con jugadores como Luis Suárez, Carrasco, Correa, Marcos Llorente, João Félix... el Atlético tenga tantos problemas a la hora de marcar. Pero ha sido la dinámica durante todo el ejercicio.
En el partido jugado en el Wanda Metropolitano el Atlético ganó gracias a un solitario tanto de Carrasco. Ante el Real Madrid el conjunto de Simeone fue inferior en el choque disputado en el feudo madridista, pero en la vuelta fue superior y no marcó nada más que un tanto. Y así es complicado ganar, pese a que seas mejor que tu rival. La sensación de los aficionados rojiblancos es que el Atlético pudo vencer en el Camp Nou. Los hinchas le piden a su equipo entrega y que vaya a por los partidos y en este sentido no hubo ninguna queja ni reproche. El Cholo, por cierto, apostó por un conjunto muy ofensivo y dejó en el banquillo a Kondogbia, con el que había ensayado durante toda la semana. El técnico argentino se sacó un último as de la manga.
El Real Madrid-Sevilla dirá si el punto obtenido es bueno o no. Aún queda mucha tela por cortar. El Atlético se va con la cabeza alta tras el choque ante el Barcelona. Independientemente de lo que suceda en el partido del domingo, el Atlético sabe que tienen que ganar los tres partidos que le restan. Nada está perdido ni nada está ganado. Parece algo obvio, pero es así. La pena es que el Atlético no haya sacado partidos en los que pudo ganar claramente por la falta de puntería. Habrá que seguir sufriendo. Ya se sabe que si hay alguien que sepa hacerlo es el Atleti. Ante el Barcelona sólo faltó marcar el golito.