El fin justifica los medios
La victoria frente al Mallorca ha supuesto un bálsamo para paliar esa ansiedad patente que afectaba a entidad, equipo y aficionados. Demasiados meses sin ganar en casa, con unos registros y un balance tan pobre que suponían una auténtica losa en la moral de los pericos. Ahora se habla mucho acerca del convencimiento que ha provocado la victoria pero quiero ir más allá. El fin justifica los medios, este será mi lema de aquí a final de temporada.
Estamos en modo supervivencia y ahora mismo existe un único objetivo: la salvación. Un objetivo ineludible sobre el que no cabe desviarse ni un milímetro en debates que nos puedan desgastar. Asumo que no jugamos bien, asumo que nuestro juego es poco convincente, pero lo que ahora toca es agarrarse al pragmatismo más feroz. Hacen falta puntos, algo más de veinte, y hay que conseguirlos como sea, jugando bien, jugando mal o haciéndolo regular. Ya tendremos tiempo de entrar en debates mucho más prolíficos acerca del juego y del debate futbolístico en sí mismo, pero ahora nos toca agarrarnos a la realidad y necesitamos sacarlo como sea.
En definitiva, unas líneas que pretenden concienciar, por si alguien aún no lo está suficientemente, de que estamos en la supervivencia más salvaje, y eso significa agarrarse a lo que sea para conseguir puntos.