El mes de diciembre es momento de repasar el año, de felicitarnos por haber llegado hasta aquí y de buenos deseos para el futuro. Encadenamos comidas, cenas, copas, galas... Esta semana ha sido especialmente festiva para los que nos dedicamos a la información deportiva. La comenzamos el lunes con la Gala de As, dedicada en su 12ª edición exclusivamente al reconocimiento del deporte femenino. Hubo que ampliar la relación de premios ante los imparables éxitos. Ellas se lo merecían desde hace tiempo, era buena hora para iniciar el desagravio. Sin salir de Madrid, este jueves se celebraron otros dos esplendorosos actos. Primero fue la Gala Marca 80 Aniversario, que congregó a lo mejor del deporte español, encabezado por el Rey Felipe. Y por la tarde, el COE puso la guinda en la sede olímpica con su Gala anual.

Mientras veía desfilar a los deportistas en una y en otra, recordé mi viejo cuaderno donde apuntaba en mi adolescencia los nombres de los campeones junto a sus resultados. No eran tantos como en esta época: Seve Ballesteros, Ángel Nieto, Manuel Orantes, Pedro Delgado... Si cualquier chaval de ahora emulara aquel hábito, se enfrentaría a una tarea de aúpa. Ni en el mejor de los supuestos hubiera soñado entonces que el deporte español iba a alcanzar su actual nivel, en disciplinas tan diversas... La karateca Sandra Sánchez, el patinador Javier Fernández, la halterófila Lydia Valentín, el piragüista Saúl Craviotto, la nadadora Mireia Belmonte, la montañera Edurne Pasaban, la badmintonista Carolina Marín, la atleta Ruth Beitia, el futbolista Iker Casillas... Y aquí lo dejo, no tengo más espacio. Necesitaría una enciclopedia.