Con la recuperación de Mikel Landa hay que ser optimistas

El ciclismo es uno de los deportes más duros que existe, sin embargo, también tiene sus ventajas y sus peculiaridades a la hora de hablar de lesiones. Es un deporte de no contacto, ni impacto, con lo cual determinadas lesiones pueden ser mas compatibles con su práctica, incluso a nivel profesional.

Y este parece que puede ser el caso de estos dos grandes ciclistas que han resultado lesionados recientemente: Mikel Landa y el colombiano Egan Bernal. El ciclista español, ha sufrido una fractura sin desplazamiento de la apófisis espinosa de la primera vértebra lumbar. Esta lesión se produce siempre por traumatismo directo, como ha ocurrido en este caso. Afortunadamente, la lesión no afecta al cuerpo vertebral, a las carillas articulares, ni por supuesto al canal medular, con lo cual, todo se reduce a la sintomatología dolorosa. Con dos semanas de reposo relativo, no absoluto, serán suficientes para que el dolor disminuya considerablemente y el proceso de osificación incipiente, le permita estar presente en la Vuelta a España, salvo complicaciones imprevistas. Además, hay que tener en cuenta que los ciclistas, son deportistas duros, sacrificados y con un umbral del dolor muy alto

El caso del ciclista colombiano del Sky, es diferente, ya que los traumatismos faciales y la avulsión dental, aunque sea importante como lo es en este caso, para un deporte como el ciclismo, no le van a crear grandes problemas médicos para estar también presente si se cree oportuno. Las férulas dentales y las mascarillas de protección si fueran precisas, dan la suficiente estabilidad a su proceso traumático, no solo para salir al inicio, sino también para competir.