Que le quiten lo bailao...

Esperaba con interés el partido ante el Atlético para ver la medida real de en qué escalón está o va estar el valencia de Nuno, donde se han producido varias novedades saludables. La primera es que se ha rejuvenecido la plantilla y el vestuario. Y no tanto en edad, que también, sino el aire, el ambiente, la frescura. De ese vestuario se desprende hambre, cuando en la temporada pasada se olía a hartazgo y conformismo. Futbolistas y caracteres como los de Banega, Guaita, Pabón, Víctor Ruiz , Cissokho, Postiga, incluso Canales restaban mas que sumaban. Y la suma de los caracteres endebles de todos ellos provocaba una nube de falta de hambre.

El Valencia siempre ha sido un equipo trampolín para jugadores, pero teniendo que destacar en Mestalla para irse a otros lugares. Sin embargo parecía que esto se había convertido en un cómodo refugio. Y Ayala y Rufete igual que se equivocaron fichando cuatro extracomunitarios, este aroma lo detectaron acertadamente. El partido ante el Atlético no fue normal. Como no lo fue el de Anoeta, donde Alves salvo al equipo de la derrota. 3-0 al Atleti en el minuto 12, con 1-0 en propia puerta a los cinco minutos, impidió ver un tú a tú mas real y hacerme una idea más exacta de en qué nivel esta el Valencia. Pero con ese 3-1, los 17 puntos y ninguna derrota en siete partidos, que le quiten 'lo bailao'.