Bevin, el oso kiwi de la Selección

Bryce Bevin es neozelandés, un kiwi, un hombre sencillo, que se adapta a todo rápidamente, algo que va en el ADN de la gente de las antípodas. Se adaptó a España en su primera etapa en 1993, formando un buen equipo con un gran grupo de jugadores como Pirulo Álvarez, Alberto Malo, Jon Etxeberria, los hermanos Torres Morote, Fran Puertas y dos jugadores que después se fueron a jugar a Nueva Zelanda como Jaime Gutiérrez y Jonadab Díez, impulsados por el propio Bryce. Viajaba a ver jugadores, entrenaba con los clubes, hablaba con los técnicos.... Se preocupó por el rugby y su gente y esa actitud dejó huella.

España consiguió ganar, entre otros, a Portugal, donde entrenó a Os Belenenses. Por eso, algo que le duele mucho es que los vecinos hayan conseguido mejores resultados que España desde que él dejó la Selección en 1997. Ahora coge el testigo de un rugby diferente a aquel, totalmente amateur. La Federación pretende profesionalizar a un grupo de jugadores de los que por ahora sólo hay 12. Bryce sabe que este es el camino para alcanzar a Rumanía, Georgia, Rusia y Portugal, y poder llegar al Mundial 2015. Pero el oso kiwi se adaptará a lo que tenga y tirará hacia delante, porque es un currante nato y los jugadores estarán con él.