Premios a la excelencia

Premios a la excelencia

Los Premios Nacionales del Deporte comienzan a convertirse en un escaparate donde ya no caben todos nuestros campeones. Campeones de lo más variado, situados todos en la cima de la excelencia. Porque para ser campeón de la Fórmula 1 han de funcionar a la perfección mil y un detalles, hasta el simple hecho de apretar un tornillo, que cuando se aprieta mal ya sabemos sus consecuencias; el piloto al final es quien se sienta y tampoco ha de cometer ningún error. La diferencia a favor de él es que toma las decisiones a 300 por hora y sin posibilidad de rectificar. Campeona de la excelencia es también, sin duda, Gemma Mengual, que la natación sincronizada es el deporte donde mejor está representada la sublimidad.

Ser campeones del mundo de balonmano no es tampoco cuestión baladí. Físicos imponentes, tácticas acertadas, rivales con gran tradición... Pues también somos campeones en un deporte de equipo olímpico. Premio para Blanca Manchón, la mejor revelación porque en un solo año pasó de ser campeona de España y campeona de Europa juvenil a campeona del mundo absoluta en esa especialidad tan popular como es la tabla a vela. Premio para Sebastián Álvaro, nuestro moderno descubridor cuyos documentales nos meten en casa conquistas que están al filo de lo imposible. Y también para todos aquellos que trabajan para el deporte en beneficio de la sociedad. Sí, tenemos motivos para sentir orgullo de nuestro deporte.