Estamos en pleno debate de cómo aprovechar el tirón del oro en el Mundobasket para aumentar el interés del baloncesto en España. Yo no confundiría el debate. Aquí el baloncesto gusta y se juega muchísimo, pero el baloncesto de la Selección y el que practican nuestros chavales. El oro de Japón seguro que va a beneficiar aún más a este baloncesto con mayores audiencias en la próxima cita de la Selección, que será el Eurobasket, y con una mayor práctica en los colegios, que ahora ídolos no faltan en cualquier posición y hay mucho y bueno donde elegir: Gasol y Garbajosa para los altos, Navarro para los tiradores, Calderón para los bajitos, Sergio Rodríguez para los jugones, Rudy Fernández para los saltarines, Jiménez para los esforzados...

En este sentido el baloncesto va a crecer mucho. Segurísimo. Problema aparte es el de la ACB, que paga dura penitencia por haber secuestrado el baloncesto en beneficio de sólo los entendidos. Pero que no extienda el problema de su nefasta gestión al resto del baloncesto, cuya salud es buenísima. Sin embargo ya resulta esperanzador que ahora comience a darse cuenta de los pecados cometidos, y una cumbre que tenían prevista en marzo para cambiar el sistema de competición en pos de un mayor interés la quieran adelantar con urgencia. Algunos clubes parecen haberse dado cuenta de que afición al baloncesto hay una barbaridad, y que lo que no interesaba era la liga ACB. Pues ahora la quieren cambiar. Con o sin Portela. Por fin.