En los playoff no hay pactos

En los playoff no hay pactos

Nunca me he creído eso de que los equipos se ponen de acuerdo para alargar los playoff y conseguir una taquilla extra. Pero es algo que, desde luego, se le escucha a mucha gente. Nunca me lo he creído porque, de ser cierto, siempre sería un pacto entre clubes pero no entre jugadores, que son quienes deciden el resultado. Los jugadores lo que quieren es acabar cuanto antes. Un 3-0 ayer para los del Barcelona seguro que les hubiera supuesto unos días de descanso. El 2-1, en cambio, les obliga a viajar a Madrid para volver a jugar el domingo. Cuestión aparte es cuando un equipo se siente tan superior con el 2-0 que se confía, pierde la concentración y deja la sensación de haber tirado voluntariamente toda su ventaja por la borda.

Alguien, no obstante, me insistía: "O sea, el cuarto partido es el domingo, un partido que 48 horas antes era imprevisible, y ahora resulta que en pleno sábado van a aparecer en las taquillas miles de entradas de un partido que nadie en su sano juicio preveía. Pues no me lo creo". Pues yo sí, e imagino que por una pura cuestión organizativa esas localidades ya estarían impresas en previsión de lo que pudiera ocurrir. También recibí al poco de terminar el partido otra llamada para darme su versión de tan ilógico resultado: "¿Sabes por qué ha ganado el Madrid? Porque el Barcelona no será quien gane la Liga. Es un equipito. Lo veremos contra el Tau". Pues ya ven. Versiones hay para todos los gustos. La mía es más simple: el Madrid es imprevisible.