La liga ACB entra en coma

La liga ACB entra en coma

La liga ACB ya agoniza. Una agonía lenta y dramática. Sólo se mantiene con vida gracias a que el baloncesto es fuerte y la Selección le da de vez en cuando una inyección de vida. Tan fuerte, que ni la ACB ha podido enterrarlo aún. Pero no tardará mucho. La audiencia del Madrid-Barcelona pronostica un coma irreversible. Todo un derby, de playoff además, y se queda en 569.000 telespectadores el viernes y en 817.000 el domingo. Pero no hablo además de un domingo cualquiera, sino de un domingo sin fútbol de Primera, sin fútbol televisado, en el que la audiencia prefirió ver antes Espejo público, Everwood y El buscador de historias antes que el baloncesto por mucho Madrid-Barcelona que fuera y por mucho playoff que se tratara.

No hay peor ciego que el que no quiere ver y la ACB lleva años sin querer darse cuenta de la realidad: su competición no interesa. Ni siquiera en los playoff y ni siquiera ya con el Madrid. Una eliminatoria de playoff le importa un pimiento a los aficionados que no sean de los dos equipos contendientes, lo cual ya limita mucho el interés a nivel general. Y los aficionados sin intereses concretos están además ya hartos de estos derbys, que casi nunca valen para nada. Y los madridistas, de su equipo, al que sólo esta temporada han visto perder 16 partidos de los 27 que le han televisado. Y si no interesa el Madrid, ni su derby con el Barcelona, ni el playoff, ¿qué queda? Nada apenas. Pues ése es el baloncesto ACB. La agonía y después... la muerte.