La tolerancia cero no aparece

La tolerancia cero no aparece

Nueve ciclistas italianos y uno checo comparecen hoy ante el Tribunal de Bolonia, implicados en un proceso instruido por Luigi Bocciolini, fiscal de Florencia. El ciclista belga Vandenbroucke aplazó el lunes su comparecencia ante el Tribunal Correccional de Dendermonde. El ciclista francés Gaumont y el escocés Millar fueron sometidos la semana pasada a un careo por el Tribunal de Gran Instancia de Nanterre. El ciclista italiano Lelli fue detenido en agosto. Los domicilios de ocho ciclistas italianos fueron registrados en mayo por orden del fiscal Paolo Ferraro. Tres ciclistas belgas están involucrados en un sumario abierto en abril por el Tribunal de Courtrai. Sólo son casos de este año. Desde 1998 son cientos.

Donde no llegan los controles antidoping llega la justicia. Basta declarar el doping como delito en Francia, Italia y Bélgica para que los fiscales actúen y descubran lo que descubren: auténticas farmacias de productos dopantes en los domicilios y habitaciones de los ciclistas. Lo mismo que tenía Manzano en su casa. ¿Son los ciclistas franceses, italianos y belgas, más algún extranjero residente, los únicos que esconden lo que se meten? ¿Es Manzano el único ciclista español que también lo ha hecho? Hay sospechas de que no. Decenas de controles en la Vuelta quedaron anulados porque la composición de la orina no presentaba la debida concentración para detectar lo que se buscaba. ¿Ésta es la tolerancia cero prometida?