El guerrero está listo

Karim Quibir se ha marcado una fecha entre ceja y ceja: el 29 de octubre; y un escenario: la Plaza de Toros de Vistalegre; y un objetivo: el título de Europa de los pesos gallos. Vive sólo para eso. Como un monje. Como los viejos campeones. Karim tiene ilusión para repartir. Ha hecho cientos de kilómetros por la sierra madrileña. Meses y meses de sacrificio solitario por los caminos que llevan al alto de Abantos. Ha hecho cientos de asaltos de guantes, y de sombra, y de punching. Le ha pegado y le ha pegado al saco hasta no poder más. Ha pasado hambre para no pasarse ni un gramo de los 53,500 que es el límite del peso gallo. Y ahora, a una semana del Campeonato, tiene los pómulos afilados, es un guerrero perfecto listo para la batalla.

Karim despide confianza y firmeza, no tiene miedo a nada. Ha estudiado a Simone Maludrottu, el campeón, de arriba abajo, del derecho y del revés. Quibir tiene el vídeo del combate del italiano con el francés Patrac, al que arrebató la corona. Y la cinta debe de estar gastada de tanto ponerla. Karim la pasa y la repasa, yo creo que se acuesta con ella. Conoce al detalle a Maludrottu, sabe cuales son sus virtudes y sus defectos. Se destapa abajo, nos ha dicho Karim. Es un cazador que observa a su presa y que aguarda el momento de saltar sobre ella. Quibir está como nunca, con un aspecto físico impresionante. Yo no quisiera estar en la piel de Maludrottu. A este guerrero de pedernal se le ha metido en la cabeza cazarle. El día 29, en Vistalegre.