Alberto Puig celebró emocionado en el Chang International el octavo Mundial de Marc Márquez y el segundo en MotoGP a nivel personal para el team principal del Repsol Honda. Una vez conseguido otro éxito, se le abre un frente importante, que es conseguir que el campeón vuelva a renovar con Honda…
-¿Se ha emocionado tanto como el año pasado?
-Siempre. A tope. Mira dónde hemos llegado.
-¿Qué siente en un momento así?
-Lo primero que hay que hacer es felicitar al piloto, que es una bestia y luego ver que el equipo Repsol Honda ha hecho un gran trabajo conjuntamente con él. Honda ha trabajado muy bien desde Japón y toda la gente que trabaja con Marc lo ha rodeado bien y lo ha hecho estar a tope, como siempre. El resultado es éste, ganar un campeonato como el que ha ganado aquí, a su manera, que es ganando. Estamos muy contentos y muy felices por él.
-¿La Honda que le han dado esta vez es mejor que la del año pasado?
-Este año la moto la hemos mejorado un poco, pero nunca puedes decir que tienes una moto perfecta, ni mucho menos. En Japón han trabajado fuerte este invierno pasado. Hemos dado un paso adelante y Marc lo ha aprovechado.
-Si hubiera podido hablar con él durante la carrera, ¿le habría pedido que se aguantara segundo o sabía que lo iba a intentar de cualquier manera?
-A estas alturas nadie puede pretender que Marc no haga de Marc. Evidentemente que lo iba a probar. Claro que quería ganar el campeonato, pero también que lo quería ganar ganando la carrera. Cuando tienes ese ADN no lo puedes evitar.
-¿Dónde cree que está su límite? Lleva 8 mundiales con sólo 26 años…
-El techo no lo sé. Lo que sí sé es que es un súper piloto y una súper persona, porque es un tipo muy normal. Esa combinación te da pie a pensar que el techo está lejos, porque ni se considera ni actúa de divo, y eso es una fórmula fundamental para que cualquier deportista de élite llegue lejos. Quiere siempre aprender y tiene la humildad para aprender. Todo esto Marc lo tiene muy asimilado y la gente que hay detrás de él sabe cómo manejarlo y aconsejarle. Esperemos que tenga la suerte que se merece.
-¿Es el mejor piloto que ha visto nunca?
-Es difícil de decir esto, pero es un fenómeno. Ha habido pilotos muy grandes en la historia del motociclismo, pero sí puedo decir que hoy por hoy Marc está por encima del resto claramente.
-¿Cree que podrán renovarle con facilidad la próxima temporada o que costará mucho que vuelva a firmar con Honda?
-La relación de Marc con Honda es muy larga. Queremos mantenerlo y ojalá pueda estar siempre con nosotros durante toda su carrera deportiva. Para ello trabajamos. Toda la gente de Honda en Japón y la de Repsol tratamos de estar a la altura de lo que él se merece, porque es un gran campeón.
-¿Qué supone a nivel personal para usted celebrar por segunda vez un título de MotoGP?
-Es muy importante. Desde que tuve que parar, siempre me he centrado en los equipos y siempre he procurado que los pilotos estuvieran lo más adelante posible. Para mí es muy importante que el piloto consiga el campeonato, porque forma parte del trabajo de uno y, a nivel individual, te sientes recompensado por tu faena. Es muy importante, porque no estamos hablando de un campeonato provincial. Esto es el Mundial de MotoGP y es más importante y serio de lo que parece aparentemente para mí. El nivel aquí es muy alto, pero él está por encima.
-¿Se le ha vuelto a escapar alguna lágrima esta vez como ya sucediera el año pasado?
-Siempre se escapa alguna lágrima por el camino.
-¿Los tíos duros también lloran?
-Siempre. Si no, no son duros. (Sonrisa).
-En un día así no le preguntaré por Lorenzo…
-(Sonríe). Toca celebrar este título.