La fiabilidad sigue retrasando la gran mejora del motor Renault
Los ingenieros de Viry-Châtillon liderados por Remi Taffin siguen trabajando para validar la MGU-K de esta temporada en el banco de motores.
30 caballos. Esta es la cifra que incorporará Renault a su unidad de potencia en el próximo Gran Premio de Canadá 2018, gracias a la investigación y desarrollo que los ingenieros de Viry-Châtillon han realizado en el motor de combustión.
Una importante evolución que debería permitir a Red Bull luchar con mejores garantías por las victorias frente a Ferrari y Mercedes, así como a McLaren y la escudería de Enstone seguir aproximándose a la zona delantera de la parrilla.
Sin embargo, desde el departamento de Essonne no todo son buenas noticias, ya que los técnicos comandados por Remi Taffin siguen luchando para alcanzar un dígito entre 8.000 y 10.000 kilómetros y validar la fiabilidad de la MGU-K prevista para este año, un componente que es clave en el sistema de recuperación de energía.
"Está claro que tenemos que trabajar en el peso y esa es una solución. Por eso no nos apresuramos a introducirlo. No hay un objetivo claro de cuándo. Más bien diría que cuando esté listo lo abordaremos. Es la fiabilidad, es poder hacer que el MGU-K funcione tanto tiempo como necesitemos. Si lo presentamos en la séptima carrera, no vamos a llegar a 13 carreras más, así que tendríamos que montar un tercer MGU-K y tendríamos sanción". reconoce Taffin.
De igual modo, el director técnico de motores de Renault afirma en 'Motorsport' que si bien este inconveniente supone un contratiempo en su hoja de ruta, el objetivo sigue siendo estar a la misma altura de Mercedes y Ferrari a comienzos del 2019: "Siempre es un problema retrasar el aumento de rendimiento, así que deseamos al menos tener fiabilidad en la pista. El objetivo es estar al menos en el mejor nivel para cuando llegue el año que viene. Es una cuestión de intentar introducir rendimiento durante todo ese año, e intentar también, si es posible, lograr algunas cosas de 2019 en 2018".
Cabe puntualizar que los franceses están utilizando en el Mundial de Fórmula 1 2018 la MGU-K de hace dos temporadas, una versión que sobrepasa los siete kilogramos que permite la normativa de esta temporada.