Honda afronta un año más su gran dilema: ¿Cuándo penalizar?
La próxima vez que Brendon Hartley equipe un turbocompresor o MGU-H recibirá una sanción de diez o cinco puestos en la F1. En el horizonte, la mejora en Canadá o Francia.
Menos de dos minutos. Exactamente un minuto y 44 segundos. Este es el tiempo que faltaba para que concluyese la tercera sesión de entrenamientos libres del Gran Premio de España 2018. Brendon Hartley intentaba mejorar su decimoséptima posición cuando perdió el control de su monoplaza en la curva 9 y golpeó duramente las protecciones del Circuit Barcelona Cataluña.
Un accidente que alcanzó los 25 G de fuerza y dejó totalmente destrozada la parte trasera del Toro Rosso, llegándose incluso a fragmentar instantes después cuando los comisarios pretendían subir el monoplaza a una grúa.
Tras llegar el coche al garaje de Faenza y revisar los técnicos de Honda el estado de la unidad de potencia, los japoneses decidieron equipar un nuevo motor de combustión, turbocompresor, MGU-H, MGU-K, centralitas y baterías para que el piloto neozelandés pudiera disputar la prueba en Montmeló.
Una decisión que encendió la alarma roja en la fábrica de Sakura por cuarta vez consecutiva en el Mundial de Fórmula 1. Porque la próxima vez que Hartley monte un nuevo turbocompresor o MGU-H, recibirá una penalización de diez y cinco puestos respectivamente.
Piloto | Motor de combustión | Turbocompresor | MGU-H | MGU-K | Centralita | Batería |
Brendon Hartley | Dos | Tres | Tres | Dos | Dos | Dos |
Pierre Gasly | Dos | Dos | Dos | Uno | Uno | Uno |