Se soltó un anclaje del escape y todo el cableado interior del monoplaza se vio afectado. A partir de ese momento, aunque la versión oficial e inicial del equipo era que estaban mejorando los reglajes, lo cierto es que McLaren tenía problemas (así lo reconocieron finalmente en la nota de prensa de final del día). "El equipo detectó altas temperaturas debajo de la carrocería, causadas por un clip de escape roto que hace que el aire caliente sea devuelto al coche y al cableado, que incluye la línea de freno. El equipo optó por desmantelar el automóvil para realizar nuevas investigaciones como medida de precaución", dijeron entonces. Sin embargo a partir de ese momento empezaron, como el día anterior cuando parecía que una tuerca iba a provocar un rediseño de todo el coche, todo tipo de teorías sobre turbos, unidades MGUH o K etc… Lo cierto es que, tal y como mostró un fotógrafo desde el circuito, a los lados del coche había unas pequeñas marcas de quemado, el equipo refrigeraba esa parte también el miércoles cada vez que paraba Alonso, pero después decidieron (tal y como tienen otros equipos como Mercedes) hacer unas pequeñas ranuras en esa parte que deja entrar el aire y refrigera la zona. Recordemos que Eric Boullier, que hablaba de "un problema menor, como un clip de escape roto", nos comentó en la entrevista con As que les podía llevar semanas o meses acoplar de una manera perfecta el nuevo motor Renault a su monoplaza.
En cualquier caso, según nos confirman desde el equipo, ese problema en concreto está solucionado y Vandoorne rueda con normalidad con un coche que aún necesita mucho rodaje para poder estar al nivel que quieren en la escudería.