Fernando Alonso: objetivo, luchar con Ferrari este mismo año

Gafas oscuras, aire de vendedor de coches de un polígono industrial a las afueras de Roma, voz áspera de mafioso, película de serie B, aquel Mattiacci fue uno de los responsables de que Fernando Alonso se fuera de Ferrari. También los resultados, las sensaciones, el aburrimiento, el convencimiento de que no podría ser campeón del mundo con la escudería italiana, como si el destino le quisiera negar la gloria. Quería ganar. Eso decía, dijo el español, aquel que llegó a pensar que los de Maranello le habían entregado su escudería. Y casi. Pero no. No ganó. Por poco, pero no. Y quería, necesitaba ganar. Por eso se fue. A donde él quería, dijo entonces en aquel final de temporada de 2014. Y acabó en McLaren.

Ese equipo en el que le destrozaron la carrera deportiva también era en el que más y mejor vio fabricar y evolucionar un coche, no se portaron bien, pero eran muy profesionales. Y si quería ganar confiaba, otra vez a pesar de los pesares, en Ron Dennis. Pero la alianza de McLaren y Honda acabó con la peor temporada de la escudería de Woking en su historia y una de las más lamentables de Fernando con un coche sin patrocinadores, un motor japonés que no estaba listo y diversos episodios, como el accidente de Barcelona en pretemporada, que llegaron para terminar tomando el sol una carrera antes del final de temporada en una silla en el circuito de Interlagos. Por ejemplo. Ganar seguía siendo un deseo imposible. Mientras en Ferrari su sustituto, Sebastian Vettel, el mismo que le había arrebatado dos títulos que debieron ser suyos, ganaba tres carreras y lograba trece podios, aunque terminaba tercero en el Mundial a 103 puntos de Hamilton. Sin duda Ferrari era mejor opción el año pasado y las críticas de los oportunistas (¿o realistas?) llegaron como una tormenta de verano.

Sin embargo, Alonso siempre se ha mostrado orgulloso y convencido de su decisión. "Ganará antes un título McLaren que Ferrari", ha dicho varias veces ante el asombro generalizado. Pero esta temporada su equipo está mejorando mucho más que el resto, aunque Ferrari sigue estando por delante, una situación, que según Alonso, puede cambiar a partir de la próxima carrera.

"Sabíamos que en Monza no íbamos a tener ritmo, pero eso puede cambiar a partir de la próxima carrera, desde Singapur estaremos en los puntos de manera regular y creo que en algunas carreras como Austin o Abu Dhabi podemos estar entre los cinco primeros y luchando con Ferrari", dijo Alonso en Monza.

Así que, ya esta temporada Alonso espera estar luchando contra el equipo que dejó porque quería ganar. No ha sido fácil, ni es el primer paso. Pero lo cierto es que para luchar por el título la próxima temporada McLaren Honda debe acabar este año al menos como el tercer equipo más o menos igualado con Ferrari y Red Bull, lejos eso sí de Mercedes.

"A partir de Singapur empezaremos un campeonato diferente. El coche parece bastante competitivo para que podamos estar cómodamente en los puntos, llegarán algunas carreras buenas para nosotros en las que tendremos que ser perfectos y maximizar nuestros puntos fuertes para estar lo más arriba posible", concluyó el astur. Así que, a pesar de que Alonso es undécimo en el Mundial con 30 puntos, muy lejos del cuarto y quinto que ocupan Vettel y Raikkonen con 143 y 136, respectivamente, a pesar de que su mejor resultado es un quinto en Mónaco por los tres segundos puestos del alemán y los dos segundos del finlandés, el español es optimista y confía en su equipo, al menos para poder volver a la casilla de inicio pero con una escudería en la que ahora sí cree para poder volver a ganar. De verdad.