NIBIRU: El mensajero de los dioses
NIBIRU: El mensajero de los dioses - En el interior del túnel
Atrévete a cruzar el túnel.
Arrancamos una barra de hierro del barril usando la llave inglesa.
Vamos a la galería de la izquierda hasta el derrumbamiento. Lo examinamos y usamos la barra.
Miramos por una grieta que aparece al quitar los tablones, pero al estar demasiado oscuro usamos sobre ella la linterna.
Aparece el esqueleto de un soldado alemán. Cogemos su insignia y examinamos su bolsillo en el cual encontramos un manojo de llaves.
Salimos de la galería y ahora vamos a la galería del fondo. Cogemos la grapa que hay en la pared de la izquierda. Nos dirigimos a la galería de la izquierda en la que vemos un montacargas. Examinamos el hueco del mecanismo a su derecha y debajo examinamos también un montón de tierra. Usamos ahí la grapa. Del montón de tierra aparece la rueda del control de válvula, la cual tendremos que encajar en el hueco del mecanismo. Una vez puesta la rueda, la giramos.
La carga bajará, así que cogemos el gancho que la sujeta.
Salimos de esta galería hasta la bifurcación y nos dirigimos a la galería de la derecha.
Examinamos el agua turbia y usamos la linterna sobre ella. Reconocemos una lata de aceite flotando. Combinamos la cuerda con el gancho y lo utilizamos para recoger la lata flotante.
Salimos de la bifurcación y vamos a la galería central. Examinamos el mecanismo de una puerta de metal nazi. Introducimos las llaves en la abertura central y empezamos a mover los cilindros.
El de la izquierda está atascado, por lo que usamos el aceitador manual sobre él. Como no nos queda aceite lo combinamos con la lata y volvemos a intentar la operación. Ahora sí podemos moverlo.
Tenemos que orientar los cilindros en una disposición que quede el de arriba con el hueco a la derecha, el de la derecha lo dejamos como está, el de abajo con el hueco hacia la izquierda y el de la izquierda con el hueco hacia arriba. Nos quedará un dibujo similar a la esvástica. Dicha combinación nos abrirá la puerta.