NIBIRU: El mensajero de los dioses - El muelle y el hotel de noche

Llegamos de noche a Francia y entramos en un hotel para alojarnos. Tocamos el timbre para llamar al recepcionista, pero no podemos alquilar ninguna habitación debido a que el hotel está lleno.

Hablamos con el huésped ebrio de nuestra izquierda, el cual nos dará una valiosa información.

Examinamos el cenicero de la recepción y recogemos una cajetilla de cerillas del hotel. Al examinarla descubrimos el número del hotel.

Salimos del hotel, para imitar la jugada que le hicimos a la secretaria de la Agencia de Permisos, por lo que usamos la cabina telefónica para hacer una llamada.

Volvemos al hotel y recibimos la llave de nuestra habitación. Le pedimos al recepcionista si puede ponerse en contacto con nuestro tío, subimos a la habitación y descansamos un poco. Volvemos a bajar a recepción y utilizamos el teléfono para quedar con nuestro tío.

Salimos del hotel y vamos al muelle para hablar con un pescador. El pescador no quiere ayudarnos así que volvemos a hablar con él.

Hasta que no le ayudemos a cargar unas cajas, el pescador no nos llevará con su barco,así que aceptamos ayudarle.

Después de un poco de trabajo duro y una buena suma de dinero, el pescador no dejará cerca de la mansión de nuestro tío.

Tocamos el timbre y entramos en la mansión.

Después de una larga conversación, el profesor nos entrega un sobre con un billete de avión y una carta destinada a una amigo suyo en Tecolut.