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The Dig

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The Dig - Capítulo VIII.La Tumba del Alienigena

Amputaciones, monstruos alienígenas, explosiones nucleares, discusiones, odio, drogas, Wagner, peleas, poltergeist, accidentes, muertes, resurrecciones... ¿ Te lo vas a perder?

Ha llegado la hora de intentar conectar el metro que conduce a este lugar. Atravesando el túnel oscuro (ya he descrito anteriormente el proceso) hasta llegar a los paneles con los cristales, Low inserta la barra azul brillante en el panel. Luego es cuestión de colocar el "cursor" en el cristal "muerto" y manipular las tres barras que suben y bajan hasta que se ilumina completamente. Una vez culminado con éxito el proceso, Low observa desde una de las ventanas como el tranvía cruza los túneles.

De vuelta en el nexo, Low sube al metro que acaba de llegar. Una vez al otro lado, como es costumbre, inicia la ascensión. Llega hasta un descanso donde se contempla el eclipse de las dos lunas a través de un agujero en medio de la cima de una montaña-isla vecina. Tal como le fuera revelado en el planetario. Encuentra una piedra suelta, que remueve con la pala, y así encuentra el camino hasta la tumba.

En el oscuro interior coloca Low la luz azul que encontró en el centro de energía que hay bajo el nexo en un orificio de la pared. Todo queda iluminado. Luego camina por la cámara, pisando una losa con las dos lunas inscritas en ella. Ésta desciende, como si fuera un pulsador, pero cuando Low se aleja de ella vuelve a su posición original. Low coloca la vara metálica de modo que el pulsador no se desactive al retirarse él. Pero de todos modos no pasa nada.

Low sale al exterior, y observando cerca de la entrada de la cripta la existencia de un poco de tierra suelta, la retira.

La luz proveniente del eclipse atraviesa ahora una lente que estaba enterrada e incide en el interior de la cripta de modo que ahora aparece una estatua. Tras tocarla, se desvanece.

Nota de El Bárbaro: a pesar de la claridad meridiana que me caracteriza a la hora de redactar mis soluciones, algunos de vosotros os obstináis en escribirme diciendo que no conseguís hacer la parte del siguiente párrafo, después de haber hecho la anterior: es decir, que no podéis bajar por el ascensor alienígena hasta los dominios de la tumba. Bien, pues hay un par de buenas razones para ello. Algunos es porque no encontráis el lugra preciso dónde apuntar el cursor, por eso os pongo aquí una imagen, que si pincháis podréis ver ampliada de modo más cómodo. Los demás, tenéis este otro problema: no habéis hecho correctamente una parte anterior de este recorrido. En concreto, a la que accederéis pinchando este otro vínculo.

Gracias en particular a Ivanna-Laura por su colaboración en desfacer este entuerto

Low se monta en el pedestal triangular donde antes apareciera la estatua, y se ve recompensado por el descenso a un complejo subterráneo de dimensiones ciclópeas. Una vez abajo, se dirige hacia una puerta guardada por dos esqueletos... mas al acercarse un cristal verde cae por una ranura y resucita a uno de los guardianes, tremendamente fiero. Low salva la situación lanzando un cristal al otro guardián. Ambos se enzarzan en una pelea de la cual ambos son perdedores.

Low coloca la barra de cinco prismas en la ranura y se abre la puerta. Sale al exterior, donde una avenida de roca conduce a una pirámide.

En su interior parece descansar en paz eterna un extraterrestre de dimensiones considerables. Tras volver a usar la barra de cinco prismas en el panel, la pirámide se desvanece. Con un cristal verde, devuelve la vida al alíen, pero como Low no domina la conversación, no hay manera de entenderse con él. Habla raro. Tras abandonar los intentos de comunicación, tras los cuales el alíen vuelve a su retiro piramidal, se pone en contacto por radio con Maggie... ¡que ya ha descifrado el lenguaje de la base de datos!

Desgraciadamente, es raptada por un ente de aspecto arácnido en ese preciso instante. Low decide buscar ayuda para rescatarla, y como el alíen no le entiende, decide que ha llegado el momento de encontrar a Brink